La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El campo planta cara a la pandemia

Un praviano diseña pantallas que le han pedido hasta de México; en Grado, una empresa facilita al Ejército potentes cañones para desinfectar

Javier Fernández Cadrecha, elaborando una pantalla protectora, en Pravia. R. A. I.

Las ideas que nacen y se cocinan en el mundo rural pueden mantener a raya el coronavirus. Tecnología del campo para luchar contra el COVID-19 en toda España. Es lo que sucede en Pravia y Grado, donde profesionales y empresas logran con su conocimiento, ingenio y medios mantener a raya la pandemia.

El praviano Javier Fernández Cadrecha vuelve cada día de su trabajo y se pone manos a la obra a fabricar pantallas protectoras que entrega a quien se las solicita. Todo comenzó cuando vio unos vídeos sobre cómo se hacen con impresoras 3D. Pronto se dio cuenta de que podía elaborarlas manualmente a un ritmo más alto que las propias máquinas: "Hacer el prototipo me llevó una hora, y una impresora puede hacer seis al día".

De la primera prueba, "recortando calderos para hacer el armazón e incorporando la pantalla", pasó a hacerlas en masa. Elaboró unas 40 y las ofreció a quien quisiera, siempre que las fueran a buscar a su domicilio. Así llegaron a supermercados, centros sanitarios y personal de ambulancia. Las solicitudes se multiplicaron, llegando no solo de Asturias o de distintos puntos de España, también de fuera: "Me llagaron a pedir desde Guadalajara, en México".

Sin embargo, para Cadrecha no es viable enviarlas a otros puntos de la geografía nacional y mundial. "Tiene que ser que las vengan a buscar a casa, si no, en lo que voy y envío paquetes, dejaría de hacer unas 15". Ya elabora al día hasta 150: "Apenas me llevan cinco minutos". Sin embargo, las peticiones se cuentan por miles y ya se está organizando un grupo de ayuda: "Con mi amigo Noé, del bar La Cueva, comencé a hacer una producción más efectiva. Ahora se están moviendo para buscar más gente que nos ayude. Sería genial".

Tal es su entrega, que ni descansó en domingo y ayer acudió a la nave de una imprenta, que se encuentra cerrada, donde aprovechó la cizalla de la que disponen para poder cortarlas más rápido que en casa. No tiene palabras para todos los que le ayudan: "Joaquín, de Gráficas Occidente, voluntarios que cortan en sus casas (Mary, Isa, Sergio...) y sobre todo a la empresa Klockner Pentaplast (Linpac Pravia) por donarnos el material y brindarnos todo su apoyo". Por el momento, tiene pensado continuar: "Obviamente preferiría estar en el sofá tomando una cerveza, pero quiero que la gente disponga de las pantallas de seguridad".

Y de Pravia al cercano Grado, ya que dos empresas originarias del concejo se han unido para luchar contra el coronavirus. Así han puesto a disposición del Ejército de Tierra un equipo de cañones nebulizadores de gran potencia para desinfectar calles y equipamientos.

Miembros del regimiento "Príncipe" del acuartelamiento de Cabo Noval acudieron al polígono de SIA Copper, en Lugones (Siero), sede del grupo Irimac&Salma, para conocer el funcionamiento de la maquinaria, que ha sido trasladada a la base militar asturiana. El grupo Irimac&Salma y Garaje Las Dos Vías están detrás de la iniciativa. "Nosotros disponemos de venta y alquiler de equipos de servicios medioambientales, entre ellos tres cañones de niebla", explica Marcos Fernández Díaz, del grupo Irimac&Salma. "Son como un ventilador que genera una corriente de agua muy fuerte y al que se añade agua para realizar una pulverización muy fina pero de gran alcance", detalla.

Las gotas tienen un tamaño medio de 70 micras y el alcance del cañón llega a 50 metros de distancia. Y además de luchar contra el polvo, se puede emplear para higienizar incluyendo un desinfectante en el agua. "Se rocía de forma muy uniforme porque las gotas son muy finas y actúa en una gran superficie porque el cañón cubre mucho espacio, además el gasto de agua es muy inferior a otros sistemas de riego convencionales", avanza Fernández.

Para montar la maquinaria contaron con la ayuda de otra empresa de origen moscón, Garaje Las Dos Vías, que también ha cedido gratuitamente tres cubas de mil litros cada una y un generador. Un mando del regimiento "Príncipe se interesó por la tecnología ofrecida. Por ello, los invitaron a ir a sus instalaciones a conocerla y probarla de primera mano.

Así, el pasado viernes un grupo de militares acudió a la nave del grupo donde probaron los cañones, que fueron montados sobre un camión del Ejército. "Hicimos unas pruebas, les gustó y realizamos la integración de todos los equipos en el camión que trajeron". Así, los cañones quedaron conectados a la cuba de agua, a la que se añadirá un producto desinfectante, conectados mediante un generador que alimenta los motores. Los militares recibieron formación in situ sobre su funcionamiento y puesta en marcha. Se llevaron un cañón ya montado en el camión. Además, el grupo de Fernández pone a disposición de las autoridades otro producto con el que cuentan, una plataforma fija por la que pasan camiones que son desinfectados por los bajos, laterales y en la parte de arriba. "Es un equipo muy útil en estos casos, aunque hasta ahora no se les daba mucha importancia", estima Fernández.

La tecnología dispuesta puede ser empleada para desinfectar calles, inmediaciones de centros hospitalarios, ambulatorios o residencias de ancianos.

Compartir el artículo

stats