El gobierno municipal del PSOE de Siero consiguió sacar adelante, en la jornada de ayer, un recorte de 638.807 euros en sus cuentas para destinar tal cantidad a las medidas de ayuda a autónomos afectados por la crisis sanitaria. La modificación recibió el apoyo de los partidos de la derecha: PP, Foro y Vox, además de la Plataforma Vecinal de La Fresneda (PVF). Los socialistas no lograron convencer a Somos, IU ni Ciudadanos.
Los fondos obtenidos proceden de recortes en algunas partidas que se daban por cerradas (para plazas de trabajadores municipales que están sin cubrir) y de la eliminación de subvenciones a entidades culturales, de festejos o dedicadas a ancianos y niños, además del premio Derechos Humanos.
En todo caso, el alcalde, Ángel García, abrió la mano a la posibilidad de recuperar algunas de las subvenciones a las asociaciones de festejos, en caso de que "la situación mejore y hagan sus fiestas".
Todas las formaciones políticas estuvieron también de acuerdo en recortar a la mitad las asignaciones a sus partidos en lo que queda de año. Sin embargo, la práctica totalidad coincidieron en pedir que se recorten también los sueldos de los concejales liberados y de los asesores municipales, de los que disponen todos los partidos a excepción de Somos.
El punto principal de debate fue la votación de los cambios en las ordenanzas fiscales y de la manera en la que se financiarían. Se aprobó -con los votos del PSOE, PP, VOX, Foro y PVF- eximir a hosteleros y comerciantes afectados por la crisis del covid-19 de los pagos en el último semestre de terrazas, agua y basuras.
La votación de este punto incluía también recortes en otras partidas para hacer frente a la rebaja de ingresos que supondrá la exención de tasas. Entre ellas declarar no disponibles los fondos para varias plazas vacantes en la Policía Local, eliminar las subvenciones a asociaciones culturales, de festejos, de mayores y destinadas a los más pequeños o eliminar el premio de los derechos humanos del concejo.
El más discordante de los partidos de la oposición fue Somos, que directamente se negó a votar en conjunto la modificación de ordenanzas y la de crédito, remitiéndose a un consenso con los agentes sociales y a recortes en emolumentos de concejales. La decisión de Somos supuso engordar el carro de la abstención, que también practicó Ciudadanos. IU votó en contra, al no ver adecuadas tampoco las partidas por las que se pasará la tijera.
El Pleno dio luz verde, además, a la vuelta del cobro por aparcar.
