Marino Córdoba se proclamará hoy oficialmente como presidente del Club Condal de Noreña. El empresario fue el único que presentó su candidatura en la segunda ronda de elecciones. Y es que el club tuvo que repetir el proceso electivo debido a que en un primer momento se habían convocado de forma incorrecta las votaciones. Una vez que se subsanaron los errores, el otro candidato, Alain Díaz Muñoz, retiró su candidatura, dejando la pista libre a Córdoba. Precisamente la dilatación del proceso electoral será uno de los handicaps de la nueva directiva para empezar a trabajar en la entidad. "El tiempo corre en nuestra contra. Si se hubiese presentado alguien más, se hubiese alargado esta situación hasta el mes de julio", comenta Córdoba.

Precisamente estos meses de parón futbolero resultaron negativos para el Condal. Córdoba teme que se produzca una "fuga" de jugadores a otros clubes por la demora en la formación de nueva junta directiva, tras la renuncia de Andrés Corsino, el anterior presidente, a presentarse de nuevo para ostentar el cargo. "La temporada se terminó hace dos meses para muchos equipos y ya estuvieron moviendo ficha. Algunos llevan anunciando traspasos de jugadores desde hace un mes. Nosotros, sin embargo, estuvimos trabajando tanto en la parte social como en la deportiva este tiempo pero no se pueden finalizar las gestiones hasta que no se forme la directiva oficialmente y sepamos del presupuesto que tenemos. No podemos hipotecar al club. Hay que ir poco a poco", remarca Córdoba.

El nuevo presidente presentó su candidatura, que estuvo avalada por más del 35 por ciento del censo electoral, cuando los estatutos del club piden al menos un 15 por ciento. En concreto, 85 socios del Condal apoyaron a Córdoba para auparlo a la presidencia. El empresario, de 37 años, estará acompañado en la directiva por Rubén Gutiérrez Colunga, como tesorero, y Antonio Martínez, como secretario, entre otros.

Córdoba ansía empezar a trabajar cuanto antes para el Condal desde la presidencia. Como puntos de partida, buscará cerrar patrocinios y otras acciones para aumentar la masa social del club de Noreña. Evitar la fuga de jugadores es otro de los puntos clave para el nuevo presidente. Una situación complicada que se agravó con la dilación del proceso electoral y también por la finalización de la liga para muchos equipos debido a la situación sanitaria actual.