Los colegios de Torazo y Santolaya siguen sumando alumnos. Si el año pasado había 35 matriculados, para el próximo curso ya hay apuntados 50 niños, lo que supone un incremento del 30 por ciento de un año a otro. Este fenómeno de aumento de vecinos en edad infantil lleva años siendo una tendencia habitual en Cabranes.

El que hace unos años era uno de los concejos más envejecidos de Asturias parece que está cambiando el rumbo. Desde los apenas siete alumnos que había escolarizados en 2003, la cifra de matriculados se quintuplicó y alcanzó los 35 en el curso pasado. Y ahora, el aumento es de siete veces más con respecto a 2003. De los 15 nuevos alumnos que ya están matriculados, siete irán a la escuela de Torazo y ocho para Santolaya, y aún cabe la posibilidad de que se matriculen más niños en septiembre con el inicio del curso.

El alcalde de Cabranes, Gerardo Fabián, avanzó que se reunirá en las próximas semanas con responsables de la Consejería de Educación para abordar este asunto. El curso pasado ya solicitó habilitar nuevos espacios para los escolares en el concejo, para que las familias no optasen por escolarizar a sus hijos en Nava, Infiesto o Villaviciosa.

"Actualmente estamos centrados en el actual edificio escolar de Santolaya que incorporará todos los servicios educativos", concretó Fabián. "Estamos trabajando en un proyecto de reforma integral de espacios para implementar en un futuro nuevas aulas y comedor, integrando en el mismo edificio el aula de 0 a 3 años", añadió.

La capital de Cabranes, Santolaya, busca convertirse en la sede educativa del concejo, sin dejar atrás al centro de Torazo. "La idea es separarnos administrativamente del CRA (Colegio Rural Agrupado) de La Coroña, en Nava. El modelo educativo tractor que hace que la escuela tenga cada vez más escolares y que incorporará Torazo este año difiere del modelo de Ceceda, que es de otro municipio, Nava. Cabranes apuesta por una escuela rural cuyo edificio principal estará en Santolaya y otro más en Torazo", argumenta Fabián.

El hecho de reorganizar recursos para disponer de un servicio educativo público en Cabranes es crucial para el crecimiento poblacional del concejo. Que exista un modelo educativo integral desde la primera etapa de Educación Infantil y hasta los 12 años (sexto de Primaria) supone para las familias que residen en el concejo disponer de un servicio con el que poder conciliar su vida laboral con la familia y sin necesidad de tener que desplazarse a otros concejos limítrofes, como Nava, Infiesto o Villaviciosa. Precisamente Cabranes es uno de los concejos asturianos que más está creciendo en los últimos años en cuanto a niños se refiere. La llegada de los "neorrurales" al concejo supuso un revulsivo en este sentido.

Otro valor añadido de Cabranes es la proximidad a otras localidades del centro de Asturias y su buena comunicación con Gijón y Oviedo, pero sin renunciar a su esencia rural. La propuesta del alcalde de Cabranes, que ya puso en conocimiento de la Consejería de Educación el pasado mes de febrero, busca dar soluciones al aumento del alumnado para que no existan problemas en el futuro. "Esa es nuestra propuesta más lógica para el crecimiento sostenible de la escuela en Cabranes y en cualquier caso es competencia y decisión de la Consejería de Educación, que están trabajando en el proyecto tanto técnico como administrativo", añadió Fabián. Ahora será el Principado el que decidirá qué se hace en los centros educativos de Cabranes.