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El misionero Fermín Riaño será el nuevo párroco de Pola de Siero

El nombramiento se anunciará en unos días l Sustituirá a Juan Manuel Hevia, que podría encargarse de la parroquia de Colloto

Fermín Riaño, durante el encuentro de misioneros celebrado en julio del año pasado en el santuario de la Virgen de Villaoril, en Navia. MIKI LÓPEZ

El misionero Fermín Riaño será, salvo sorpresa de última hora, el nuevo párroco de Pola de Siero, cargo en el que sustituirá a Juan Manuel Hevia. Nacido en Avilés en 1960, Riaño ocupará un cargo que Hevia -que previsiblemente será destinado a la parroquia de Colloto- solo ostentó durante cuatro años.

El avilesino sumó casi 30 años como misionero en Udon Thani (Tailandia), en la frontera con Laos y Camboya. Antes fue coadjutor en la parroquia de Sama de Langreo. Se fue a Tailandia como misionero en 1991 y volvió a España a finales del año pasado, tras ser responsable de las Obras Misiones Pontificias en el país asiático.

Los esfuerzos de la misión de Udon Thani se centran, entre otras muchas actividades, en mejorar la red de suministro en un país en donde sólo llueve cuatro meses al año, diversificar los cultivos, prestar apoyo sanitario y facilitar educación y formación profesional a los jóvenes.

Hace tres años atendía también una casa de acogida para ancianos abandonados. "Aunque no era habitual, ahora pasa que los tailandeses no se preocupan de sus padres y de sus abuelos", señalaba Riaño en declaraciones que realizó entonces a LA NUEVA ESPAÑA. El sacerdote avilesino cuidaba en aquel momento en el país asiático de treinta ancianos, muchos de ellos con enfermedades y en precaria situación económica. Pero le resultaba un trabajo sencillo porque "la gente colabora", a pesar del férreo control del gobierno que dirige el país.

Otra de las actuaciones de Riaño se orientó a la creación de una parroquia cerca de la frontera con Laos, que aglutina a más de 300 feligreses en una población de 1.500 habitantes dedicados en su mayor parte a la agricultura. "En un mundo budista, el ser católico es llamativo, por lo que el diálogo interreligioso es muy importante", aseguraba el misionero en 2017, pues en Tailandia, en una misma familia, suelen convivir budistas, cristianos y otras religiones. Los cambios decididos por el Arzobispado de Oviedo se confirmarán en las próximas horas.

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