La hierba invade los caminos, la basura llena los cubos, el transporte público solo pasa dos veces al día y el internet va mal. Es el relato de los vecinos de la parroquia de Vega de Poja, en Siero, cansados de una situación que "se va agravando" y para la que piden "soluciones". Afirman sentirse "abandonados" e incluso apuntan, en ácida crítica, que "vivir en la zona rural es de zumbados".

La primera queja tiene que ver con la suciedad. Tanto por la falta de desbroces como por la recogida de basuras, a su juicio escasa. "Los contenedores están llenos e incluso se forman pequeños vertederos de muebles. Uno nos lo recogieron la semana pasada", explican los vecinos. Los hierbajos invaden también los caminos públicos y las carreteras, "llenas de baches, aunque antes de las elecciones pusieron algún parche". Junto a las viejas escuelas de Vega de Poja la maleza crece descontrolada y eso ha generado "un problema con las ratas", aseguran.

Según explican, "hace un año que no vienen a hacer mantenimiento". Algo que ha generado una montaña de escritos en la mesa de Loli Cifuentes, representante de la asociación de vecinos local.

"Ahora ya no hay alcaldes de barrio y yo hago lo que puedo, pero no tengo la varita mágica para resolverlo todo", apostilla. En todo caso, espera que puedan solucionar estos problemas, así como otros que también marcan la vida de los vecinos. Uno de ellos es el transporte público. "No hay arcenes para poder ir caminando hasta Pola de Siero y los autobuses pasan dos veces al día. Para moverse dentro del propio concejo puede llegar a ser una odisea", cuentan.

Si la falta de transporte es un inconveniente, también lo es la conexión a internet. En enero, Telefónica y el Ayuntamiento de Siero anunciaron un ambicioso plan para llevar el internet de alta velocidad a la mayor parte de la zona rural. Sin embargo, algunas parroquias como Anes, San Miguel de la Barreda o Vega de Poja no fueron agraciadas en el reparto.

"Parece que nos vamos a quedar un tiempo más sin ello", reflexionan los vecinos de Vega de Poja, que, además, temen que se vacíe aún más la zona.

Las disputas entre la zona rural de Siero y los gobiernos local y regional viene siendo una constante desde hace años. De hecho, la URS (Unión Rural de Siero) denunciaba en pasadas semanas en este diario que se seguía sin atender la gran mayoría de sus peticiones históricas, recogidas en un informe.