La prioridad es la limpieza. El gobierno municipal de Noreña lo tiene claro, reconoce que fue la gran asignatura pendiente del mandato pasado y, por eso, está centrando su inversión en este aspecto.
Ayer, el edil de urbanismo, Pelayo Suárez, presentó un nuevo aspirador "moderno, que mejora nuestros equipos y que facilita el trabajo de los empleados municipales, ya que es eléctrico, por lo que también respeta el medioambiente".
El aspirador ha tenido un coste de 14.000 euros, que se han abonado con el remanente presupuestario de 2018. A estos hay que sumar otros dos aparatos sopladores, que ya están en funcionamiento.
"Estamos haciendo una apuesta firme, ya habíamos incorporado una persona más al equipo de limpieza y ahora tenemos prevista la adquisición de un camión hidrolimpiador, por valor de 39.000 euros".
Este nuevo paso para mejorar el aspecto de la localidad está pendiente de completar la licitación. "Estamos pendientes de cerrar alguna de las opciones que se nos plantean. En principio, antes de que acabe el año estará funcionando", subrayó Suárez.
Todo va orientado a solucionar una de las asignaturas pendientes del concejo, reconocida en diversas ocasiones por miembros del gobierno de IPÑ. Noreña se está limpiando.
