Las fiestas del centro de Asturias continúan siendo castigadas por la situación de pandemia mundial. La mayoría de las celebraciones se están limitando a poco más que una misa o al reparto escalonado del bollu. Ayer hubo dos celebraciones. La de Nuestra señora del Rosario en Muñó y el día del socio del Orfeón Condal de Noreña. Además, el próximo sábado también habrá un mínimo acto por las fiestas de Marcenao.
En Muñó no pudo haber procesión ni la tradicional subasta del ramo. El acto simbólico consistió en portar el ramo a la figura de la Virgen y en una misa. Las encargadas de hacer la ofrenda fueron Lucía Figaredo y Fátima Bartolomé, de 15 y 16 años.
En Noreña, el orfeón Condal celebró su día del socio. Una fecha señalada en la que la gente suele ir a comer al parque de Los Riegos, donde se celebran diversas actividades. Esta vez no pudo ser. El colectivo noreñense repartió los bollos y el vino en los jardines del Ayuntamiento y la idea de hacer una comida en la calle tendrá que esperar.
Finalmente, el próximo sábado, la asociación de festejos Santa Cruz de Marcenao repartirá el bollu como único acto festivo de este año. Para evitar aglomeraciones, el reparto se realizará a domicilio desde las 9.00 horas.
