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La obra del IES La Fresneda provoca daños en cinco chalés y hundimientos de terreno

Los propietarios denuncian que la constructora "no se está haciendo cargo" y la preocupación sigue en aumento: "Las grietas van a más"

Grieta en el porche de uno de los domicilios.

Las vigas maestras comienzan a agrietarse, los ladrillos de los porches se desprenden y los jardines, antes prácticamente llanos, tienen ahora una pendiente notable. La hilera de chalés ubicada en lo alto de la parcela donde se construye el Instituto de La Fresneda (Siero) se hunde. La preocupación de los vecinos va en aumento, a la par que crece el número de casas afectadas. Según relatan, los residentes se han dirigido al Ayuntamiento, a la Consejería y a la constructora. Esta última parecía que iba a responsabilizarse de los arreglos, pero, tras empeorar la situación de las viviendas y transmitírselo al perito que había ido a ver sus casas y colocado testigos, no han recibido respuesta.

Hace algo más de dos meses, Ignacio Arganza ya avisó de cómo su casa se estaba deslizando al haberse excavado a pocos metros de ella sin poner contención. Ahora, los chalés de al lado también están en la misma situación. "Están afectadas unas cinco viviendas", explica Rafael Casielles, propietario de otro de los chalés de la hilera afectada.

En el interior de su domicilio las grietas van aumentando rápidamente. "Cada día se agrandan más, el porche se va separando del suelo y el jardín cada día está más inclinado", indica. El problema comenzó en marzo y, tras el confinamiento, enviaron un escrito al Principado, "que nos remitió a la constructora", puntualiza Fabiola Fernández, propietaria de otra de las viviendas.

Ella cuenta que enviaron un perito en el mes de junio. "Nos puso testigos, decía que era un problema exterior, nada estructural". Sin embargo, en el domicilio de Arganza ya se ha agrietado el interior, incluidos los pilares maestros. En el resto de domicilios, a la vista de cómo evolucionan las grietas exteriores, temen que "pueda pasar lo mismo". De hecho, al dilatarse las juntas en las que se habían colocado los testigos, "afectando incluso a una viga exterior que sujeta los cristales del porche", escribieron al perito para que volviera. "No hemos recibido respuesta alguna y tememos que al final tengamos que hacernos cargo de ello", coinciden Casielles y Fernández.

Les da la sensación de que las instituciones "se están pasando la pelota" y no acaban de confirmarles que les vayan a arreglar los desperfectos. "Nos comunicamos primero con el Ayuntamiento y nos dice que no es su competencia. El Principado entiende que es la constructora la responsable y estos empiezan a decir que no es un fallo de ejecución, sino de proyecto. Así que debería pagar el seguro del proyectista".

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