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Las inmobiliarias resisten en Pola de Siero: "El mercado se mueve, incluso los locales"

Hay más demanda que oferta de pisos en alquiler y se ha disparado el interés por las unifamiliares y las fincas edificables, coinciden los agentes

José Ramón Vicentiz, en su agencia de Pola de Siero. S. ARIAS

El sector inmobiliario en Pola de Siero resiste. Pese a las malas perspectivas económicas derivadas de las consecuencias de la crisis sanitaria, las agencias polesas aseguran tener bastante trabajo. Se mueve la compra-venta de pisos e incluso el mercado de los locales comerciales, para propia sorpresa de los agentes inmobiliarios. Hay, además, más demanda que oferta de inmuebles en alquiler. Es decir, haría falta que más propietarios con viviendas vacías se animaran a ponerlas en arrendamiento.

"Es muy curioso, porque no lo esperábamos, no son muchos, pero recientemente sí hemos alquilado unos cuantos locales comerciales ya preparados para iniciar negocios de hostelería o estética", señala María Ángeles Rivas, profesional del sector en la Pola. En su agencia, no han parado de trabajar en los últimos meses, sobre todo, en la gestión de contratos de alquileres: "Ya no hay producto", dice sobre la oferta disponible, casi agotada.

En similares términos se pronuncia el agente inmobiliario, José Ramón Vicentiz, quien puntaliza que con la alta demanda de alquileres "los precios pueden subir un pelín, pero no es nada exagerado, están estables".

Los clientes buscan pisos amplios con terraza y luminosidad o casas con terreno. Una tendencia general que surge tras el confinamiento por el covid-19. Y el perfil mayoritario son personas de 28 a 40 años, que buscan un nuevo domicilio en zonas fuera de las ciudades, pero bien comunicadas, como es el caso de Siero. "Hay de todo pero la mayoría son gente que viene de Gijón u Oviedo o de otras zonas más urbanas para estar en una zona más tranquila y bien comunicada", aprecia Vicentiz.

La buena conexión a Internet, pensando en el teletrabajo, es una de las principales exigencias de inquilinos a la hora de buscar vivienda. La venta se mueve, pero los agentes también matizan que hay "prudencia". "Hay consultas, pero la gente se lo piensa y aquí es verdad que están un poco más a la expectativa", comenta Beatriz Díaz, comercial inmobiliaria.

En las ventas, destaca la vivienda unifamiliar o la búsqueda de parcelas edificables, señala la agente María Ángeles Rivas.

"Todo lo que ya está construído, de 80.000 euros para abajo, se está moviendo muy bien", dice José Ramón Vicentiz. La compra de vivienda interesa a personas de más de 45 años, aprecian los agentes, que detectan también clientes provenientes de fuera de Asturias que buscan una segunda residencia.

La situación de Pola de Siero no se produce en el conjunto del municipio. De hecho, en Lugones, sucede lo contrario: Alquiler y venta están en horas bajas y eso además está afectando a los precios, que descienden. Roberto Rodríguez, gerente de una inmobiliaria, explica que "los precios están más bajos porque hay mucha oferta, y el que quiere vender tiene que reducirlos".

Así las cosas, señala, el alquiler de un apartamento amueblado con garaje ronda los 400 euros y el de un piso de dos habitaciones alrededor de 450. En cuanto a las ventas, ocurre más de lo mismo. "Hemos vendido un piso de tres habitaciones, reformado, en 55.000 euros, pero claro, tenía ya 40 años. Algo nuevo o de pocos años cuesta alrededor de 130.000 o 140.000 euros", añade Rodríguez.

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