Las naves del polígono de Silvota que resultaron quemadas en un incendio el pasado mes de agosto ya están en plena fase de reconstrucción y solo falta un inquilino para ocuparlas por completo. Así lo apuntaba ayer el propietario del suelo, que cuenta con tener listas las nuevas instalaciones a finales de mayo, tras varios meses “duros”, después del incidente que hizo que las instalaciones acabaran completamente calcinadas.
El empresario afectado está ya inmerso en el proceso de reedificación de los 8.000 metros cuadrados de espacio comercial e industrial. Por el momento ha ejecutado la reparación de una primera nave que no se había calcinado por completo, iniciando también la cimentación, para poder completar la reconstrucción, con un plazo aproximado de cuatro meses.
Respecto a la ocupación de ese espacio, el propietario del suelo no tiene duda alguna. Indica que la mayoría de las compañías, principalmente almacenes de productos chinos, que ya estaban allí instaladas, seguirán. Solo queda disponible una nave, que espera alquilar a lo largo de la próxima semana, dejando cerrado este capítulo.
La propiedad ha iniciado la reedificación de los 8.000 metros cuadrados de espacio comercial
El incendio ocurrió el último día del pasado mes de agosto. Un domingo que fue trágico para una de las principales áreas empresariales del centro de Asturias. Tras una fuerte tormenta matinal, posible origen del siniestro (la principal hipótesis siempre fue la del impacto de un rayo), las llamas calcinaron seis naves. Cinco de negocios de titulares chinos y una de una tienda de motocicletas.
Costó controlarlo. Tuvieron que acudir efectivos de Bomberos de diversos puntos de Asturias. Fueron momentos de gran tensión, pues los trabajadores que mantenían su actividad a pesar de ser fin de semana se arremolinaban en el aparcamiento del hotel del polígono, justo frente a las naves en llamas. También fue necesario desalojar un gran supermercado situado en las inmediaciones de las instalaciones de uno de los comercio en llamas. El hecho de que el fuego estuviera próximo a un recinto con productos químicos inflamables incrementó entonces el temor de vecinos y autoridades.
La actuación de los equipos de Emergencias fue rápida. Pronto llegaron a la zona efectivos del cuerpo de Bomberos de La Morgal, el más cercano. Trataron de sofocar las llamas, pero la tarea era casi imposible. Se sumaron a ellos efectivos de Proaza, San Martín del Rey Aurelio y Oviedo. El helicóptero también lanzó agua desde las alturas y, cuando cayó la noche, la situación quedó bajo control. Eso sí, las naves siguieron echando humo durante casi una semana.
El presidente de los empresarios del área industrial, Pablo G. Vigón, asumió que el incendio fue “un golpe duro, una catástrofe”. Finalmente, una vez que los seguros concluyeron la investigación, se dio paso a la recuperación e los locales afectados.
El propietario de la práctica totalidad de las instalaciones calcinadas lo tuvo claro desde el principio: “Vamos a reconstruir”, reveló entonces a LA NUEVA ESPAÑA. Su promesa se ha cumplido y, a día de hoy, la estructura metálica que sustentará los locales ya se levanta en el suelo de Silvota. En principio, si no hay inconvenientes, la actividad volverá a las parcelas el último día del mes de mayo.
