Mejorar la Senda del Oso se ha convertido en una prioridad para el Gobierno del Principado. De ahí los 416.779 euros que ha reservado para intervenciones de reforma en los cuatro municipios por los que discurre: Santo Adriano, Proaza, Teverga y Quirós. De esta cuantía, 226.779 euros se corresponden con las obras realizadas el año pasado, mientras que a los trabajos de este ejercicio se destinrán 190.000 euros, lo que convierte esta actuación en la mayor desde la puesta en funcionamiento de la ruta, que hoy fue visitada por el presidente del Principado, Adrián Barbón, y cuyo primer tramo, entre el área recreativa de Tuñón (Santo Adriano) y Proaza, fue inaugurado en mayo de 1995.
La Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial ejecutó en 2020 obras para mejorar la seguridad de la senda. En concreto, se repusieron las barandillas perimetrales en zonas que presentaban deficiencias, mientras que en otros puntos se han sustituido las antiguas por un nuevo vallado, más duradero y seguro, que evoca el trazado del ferrocarril por el que avanzaba el tren minero que recorría el valle del río Trubia, sobre el que e construyó la ruta.
También se han colocado en laderas y túneles elementos de seguridad, entre los que destacan los muros de contención a la altura de Caranga (Proaza).
Las tareas para mejorar la seguridad de la Senda del Oso continúan este año y se complementarán con trabajos de reparación del firme y de refuerzo de la señalización interpretativa del trazado. Su desarrollo se compatibilizará con el uso público de este espacio, que constituye uno de los itinerarios más visitados de Asturias y un importante elemento de desarrollo socioeconómico del valle del Trubia.
Su mantenimiento, debido a las condiciones meteorológicas y a su largo trazado, requiere de un esfuerzo continuo para garantizar unas condiciones óptimas a sus visitantes.
La Senda del Oso, de 34 kilómetros de longitud, discurre por un angosto valle con paredes rocosas muy verticales, anteriormente utilizado como vía férrea para tráfico de minerales. La senda es también la entrada al parque natural de Las Ubiñas-La Mesa, un espacio en el que la Dirección General del Medio Natural y Planificación Rural prevé invertir este año cerca de 100.000 euros.
En este sentido, se realizarán obras para favorecer la movilidad sostenible, como el establecimiento de aparcamientos disuasorios. El pasado año ya se habilitó uno en Cébrano (Teverga) y están previstos otros dos más, para el alto del Palo (Lena) y el área de autocaravanas de Quirós. También se instalará un punto de información a la altura del embalse de Valdemurio.
El Principado resaltó su apuesta por la Red Natural de Asturias, al apuntar que incrementó este año su partida presupuestaria para ella en un 112 por ciento. “Las actuaciones se abordan con el doble objetivo de la conservación y mejora de los espacios y su biodiversidad, y el desarrollo económico de estas zonas”, indicó el Ejecutivo. Entre las previsiones figuran obras en infraestructuras viarias, equipamientos ganaderos, desbroces y tratamientos silvícolas, proyectos de uso público, como miradores o aparcamientos, y labores de mantenimiento de sendas y caminos. Una de las novedades de este ejercicio es el Plan de Restauración de Ecosistemas Fluviales, cofinanciado con fondos europeos y que se enmarca en la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos. Esta iniciativa se centra en recuperar y conservar los ríos, potenciar su patrimonio natural, fomentar el uso racional del espacio fluvial e impulsar el desarrollo sostenible.
La Red Natural de Asturias, que integra los espacios naturales con figuras de protección, se extiende por más de 400.000 hectáreas, el 40 por ciento de la región, y cuenta con 19 equipamientos de información, a los que se sumarán otros tres en Quirós, cabo Peñas y Sobrescobio.
