Los miembros de la Asociación de Vecinos de San Martín del Mar, de Villaviciosa, están recuperando tras el parón por la pandemia la tradición de las sextaferias para limpiar y mejorar el entorno de la parroquia. Y lo han hecho este fin de semana con una iniciativa en la que participaron medio centenar de voluntariosos, entre los que incluso había una docena de niños que se sumaron a una propuesta con la que se también se conciencia sobre la importancia de respetar y cuidar maturaleza y medio ambiente. La actuación consistió en la recogida de residuos en la playina de Bonhome, en las cunetas de la zona, en el área hasta la capilla del Requexu y también en los alrededores del eucaliptal de El Puntal.
Según explicaron los organizadores de la cita para retirar residuos de esta zona maliayesa, la tarea fue ardua y se recogió muchísima basura. De hecho, se llenaron hasta dos contenedores grandes con casi cuatro toneladas de desechos.
Entre lo recogido, hasta 26 ruedas de gran tamaño que llevaban enterradas años en la playa y que, por fin, han sido retiradas. Como por desgracia es habitual cuando se realizan este tipo de limpiezas, han aparecido grandes cantidades de plásticos, botellas de cristal, hierros y hasta piezas de barcos.
“Con unión se pueden hacer muchas cosas. A los niños les gustó mucho participar y de paso les creamos conciencia de cuidar nuestro medio ambiente. La jornada que fue todo un éxito”, señaló Saúl García, presidente de la Asociación de Vecinos de San Martín del Mar, una entidad con numerosos socios que, además, están muy implicados con las actividades del colectivo y las que se realizan para mejorar el propio entorno en el que viven.
Jornada de convivencia
Los responsables del colectivo han querido agradecer una vez más la colaboración de “gran respuesta y participación” de los vecinos en esta sextaferia, así como también el respaldo del Ayuntamiento de Villaviciosa y del consorcio para la gestión de residuos Cogersa por la cesión de material y utensilios necesarios para desarrolar los trabajos realizados. Al final de la jornada un pincheo en el área recreativa local cerró un día que también fue de convivencia entre vecinos.