Hace unas semanas en el museo de Fernando Alonso en Llanera se recibió una llamada de un amante del motor. Quería saber qué horarios había para las visitas. La pregunta la hacía un turista apurado: tenía su alojamiento en León y tenía que darse mucha prisa para llegar al recinto antes del cierre. La anécdota la relataba ayer la jefa de eventos del museo, Cristina Vergara, al hilo del acuerdo recién firmado entre el centro que recoge la historia y méritos deportivos del piloto asturiano y la patronal del sector de la hostelería y el turismo de Asturias, Otea.

Un acuerdo que va a prermitir que visitar el museo de Fernando Alonso sea más accesible para los turistas que se alojen en unos 600 establecimientos asociados a Otea. Gracias al convenio que se rubricó ayer entre el presidente de la entidad, Jose Luis Álvarez Almeida, y el padre de Fernando Alonso y presidente de la fundación que lleva el nombre del deportista, José Luis Alonso -también estuvo presente el vicepresidente de alojamientos de Otea, Fernando Corral- las empresas de la región aprovecharán un poco mejor “un aliciente” de Asturias como puede ser conocer al detalle el mundo del motor asociado a un piloto de trayectoria internacional. Y a la inversa: podrán llegar más visitantes a un museo que está fuera de los circuitos más típicos del turismo.

El acuerdo implica que se pone a disposición de los visitantes un paquete que incluye alojamiento en un local asociado y visita al museo de Fernando Alonso. Esto beneficiará primeramente al usuario, luego a los hoteles y al museo, y finalmente a la región, sostienen los impulsores. Un ejemplo: si un hotel cuesta 90 euros la noche y la entrada reducida al museo 15 euros, con este acuerdo el visitante no pagaría la suma independiente sino una cantidad menor.

“Queremos ayudar al museo para que vengan más turistas y más visitantes. Este museo es una de las joyas que tenemos en Asturias y que tenemos que poner en valor”, afirmó Almeida. El presidente de Otea, fan declarado de Alonso, también recalcó que el museo “probablemente no sea tan conocido” como se pueda creer y por eso, el nuevo convenio es bueno para todos. Tampoco es descartable que el museo se conviera en un aliciente para que algunos turistas alarguen un día más en la región, con lo que ello implica.

El convenio ya estaba sobre la mesa antes de la pandemia, pero con la llegada del coronavirus se quedó paralizado, y ahora se ha relanzado.

Por lo que respecta a las previsiones de ocupación que maneja Otea para este verano, de nuevo son buenas, aunque como resaltan desde la entidad, para recuperarse de la pandemia necesitarían un verano “excelente”, superando el 90 por ciento de la ocupación.