Cada vez quedan menos vecinos sin saneamientos en Llanera. La última actuación, en el entorno de Villabona, finalizó ayer, según anunció el Alcalde, Gerardo Sanz, acompañado del Vicepresidente Juan Cofiño, que visitó la sede municipal: "Hay que ir trabajando con perspectiva de futuro, con programación y planificación", señaló el Alcalde, agradecido al Principado. En los próximos presupuestos se incorporará una partida de 300.000 euros para un nuevo aliviadero en Lugo. La inversión de la Consejería de Medio Ambiente en esta obra fue de 1.183.631 euros, tuvo un plazo de ejecución de 22 meses y dará servicio a un total de 493 vecinos de la zona rural llanerense.

"Nuestro principal problema es, precisamente, que somos muy llanos", señaló el Alcalde tras mostrar el plano de la actuación realizada. En él se muestra la conducción, a escala, de una tubería de 9.237 metros por la que se trasladarán los residuos, por gravedad, hasta diferentes aliviaderos del colector interceptor de Villabona. Están situados en las localidades de Veyo, La Vega, La Cigoña, Robledo, Remoria y Tabladiello.

Las obras se estructuraron en ocho colectores, en función a los puntos de recogidas y a la red de saneamiento. A su vez, se incluyeron 255 pozos de registro y 85 acometidas domiciliarias. "Inicialmente habían quedado viviendas fuera del trazado y se fueron haciendo modificaciones para que estas se incluyeran", resaltó Sanz.

Esta no es la única actuación pendiente en la zona. Las obras de construcción del punto limpio de Cogersa están a punto de licitarse, así como la retirada de acopio de hidróxido cálcico de la antigua Calprin.