Carreño reforzará la seguridad en el entorno del polígono industrial de La Granda con la instalación de doce nuevos hidrantes a modo de prevenció contraincendios. La actuación se realizará en la AS-110, en la CE-9 y en dos viales que parten de esta última arteria, ya que ahí se encuentra una canalización con presión suficiente para el servicio que necesitan los nuevos hidrantes.
Sí que habrá que realizar una obra de canalización en el camino de La Calandia, ya que el diámetro del ramal existente es insuficiente. Los doce hidrantes que se instalarán irán enterrados bajo una arqueta de hormigón, que se identificará por el color rojo y se dispondrán de acuerdo a la normativa, evitando en la medida de lo posible el paso de vehículos y el estacionamiento sobre ellos. Una vez que concluya la instalación de los mismos, se procederá a su señalización vertical.
Se trata de una actuación contemplada en las conclusiones del Plan integral de seguridad del área de Tabaza y Logrezana, elaborado el pasado año y que contará con una inversión total de 40.806,22 euros. Serán financiados al 58% por el Ayuntamiento de Carreño y al 42% por el Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (Idepa). Ya se han licitado las obras y, una vez que se adjudiquen, se prolongarán durante tres semanas.
La actuación se enmarca en el polígono de La Granda, que da cobijo a catorce empresas con un total de 155 trabajadores. El área industrial lleva en funcionamiento como tal desde 2002, aunque ya desde la década de los 80 del pasado siglo habían comenzado a instalarse en la zona varias empresas que iniciaban su actividad.
