El concejo de Carreño quiere que se le incluya en el Plan autonómico a corto plazo para la reducción de los niveles de partículas en suspensión en la zona oeste de Gijón, y así se lo ha trasladado a la Consejería de Medio Ambiente y Cambio Climático, dentro del período de alegaciones.

Desde el Consistorio carreñense se apela a la cercanía geográfica entre ambos concejos, que son limítrofes. “Una parte muy significativa de las fuentes contaminantes examinadas y contempladas en el plan se encuentran localizadas en el concejo de Carreño o en sus límites inmediatos y, en cualquier caso, la zona este de nuestro concejo se ve afectada directa e intensamente por éstas al igual que Jove, Pescadores, Muselín, Lauredal y parte de la Calzada y de Cerillero”, sostienen desde el Ayuntamiento.

En Carreño se desarrolla de una forma importante la industria pesada y la zona de Aboño acoge actividad de El Musel, con un notable tráfico pesado que circula en el día a día por las carreteras de Carreño. “Parte de las vías de comunicación por carretera examinadas y contempladas en el citado plan autonómico por la influencia del tráfico en la calidad del aire discurren por el concejo de Carreño, siendo la rotonda de El Empalme un punto clave en las comunicaciones terrestres de la zona”, añaden desde el Consistorio.

Al mismo tiempo, el Ayuntamiento de Carreño sostiene que la medida número doce del plan a corto plazo establece que el tráfico pesado “sucio” utilice la entrada de Aboño como vía de acceso a El Musel. “Por ello, no entendemos cómo se nos deja fuera del plan con la implantación industrial que tenemos y el tráfico pesado que soportamos”, afirman.

El Principado ya ha diseñado el plan, al que tiene previsto destinar diez millones de euros en dos años, y Carreño quiere que se le tenga en cuenta, ya que considera que comparte los mismos problemas de contaminación que los barrios de la zona oeste de Gijón. Por ello, confía en que el Principado tenga en cuenta las alegaciones planteadas.