El éxito de los nuevos abonos de autobús con precio reducido también tiene, en algunos concejos de Asturias, su cara negativa. En la capital de Carreño, en Candás, hay indignación por la falta de plazas de autocar a primera hora de la mañana. "El autobús viene prácticamente lleno de Luanco", se quejan los usuarios candasinos. Sin ir más lejos, la situación de hoy del bus que realiza el trayecto Luanco-Oviedo a las ocho de la mañana fue la siguiente: a la primera parada de Candás, situada en la calle Palomares, llegó con tan solo dos plazas libres. "Nos quedamos 18 personas fuera que teníamos que ir a trabajar o a estudiar", denuncian los vecinos.

A ellas habría que sumar los viajeros que tampoco pudieron subir en las otras dos paradas que existen en la villa marinera: la del centro de salud y la de La Matiella. Y no es la primera vez que ocurre. Desde la puesta en marcha en septiembre de la tarifa plana del Consorcio de Transportes de Asturias (CTA), que ofrece viajes por toda la región por 30 euros al mes y ahorros de hasta el 86%, esto es una constante. "La única solución que nos dan es que esperemos al autobús siguiente", critican. El problema es que la próximo autocar no pasa hasta una hora después y el único medio de transporte público que conecta Candás con Oviedo es el autobús. "Reclamamos que pongan más líneas", insisten los candasinos.

Los universitarios relatan más problemas ocurridos en las últimas semanas, también vinculados al aumento de demanda del transporte público. "Esto nos pasó ya dos veces. Estar sentados en el autobús para ir a Candás y nos hacen bajar a todos porque no había sitio para los viajeros del HUCA. La última vez nos tuvieron esperando quince minutos con lluvia y frío. La gente no se paraba de quejar", aseguran.