La Asociación de Autónomos, Comerciantes y Servicios de Villaviciosa (Acosevi) está inmersa en un proceso de cambios tras la renuncia de Cristina Simón a la presidencia tras más de cuatro años en el cargo. La hostelera ha decidido dar un paso atrás, quedando en su lugar Ángel Ballina, quien hasta ahora ejercía como vicepresidente. Este "ascenso" es una medida provisional, hasta que en primavera se convoque la asamblea anual del colectivo. "La idea es que pueda entrar gente nueva a la directiva, que traiga ideas frescas y que ayude a dinamizar la asociación", indica Ballina.
La entidad ha crecido en asociados desde la pandemia. Una circunstancia impulsada por el importante tejido de emprendedores y autónomos con los que cuenta el concejo. "La villa, sin dejar de ser un pueblo, tiene población, mucha vida y eso hace que haya comercio y hostelería. Hay un goteo de ventas durante todo el año, no solo en fechas concretas, y eso se debe a que hay una clientela fija, lo que a su vez anima la apertura de negocios", explica Ballina.
Esa diversidad se ve reflejada en la propia asociación, que cuenta entre sus asociados con cafeterías, tiendas de ropa o restaurantes, pero también con asesores, como es el caso de Ángel Ballina, talleres de coches o un gran número de artesanos. Para todos ellos, Acosevi puso en marcha hace más de un año una plataforma on-line con la que "darles la oportunidad de estar en internet". Un proyecto ambicioso que, como reconoce el nuevo presidente, "se ha estancado un poco". "La venta on-line es compleja y requiere mucha dedicación. Tienes que estar pendiente de actualizar tu stock, atender las peticiones, subir los nuevos productos... Y tienes que posicionarte, con la inversión que ello requiere", detalla el nuevo presidente de Acosevi.
Ballina es consciente de la importancia que tiene a día de hoy estar presente en la red, aunque también advierte de las consecuencias que esto puede tener para el pequeño negocio. "Comprar on-line es muy fácil y accesible, cualquiera puede hacerlo, pero, al final, lo que se está consiguiendo es matar poco a poco al comercio local", lamenta.
Ni siquiera la pandemia, subraya el responsable de Acosevi, ha conseguido poner freno a esta situación. Si bien en un primer momento "la gente fue más consciente de la importancia de apoyar al pequeño comercio, con el paso de los meses la situación ha vuelto a la normalidad. Es como las mascarillas, que hace un año no salíamos sin ellas a ningún lado y ahora casi las hemos olvidado por completo", señala Ángel Ballina.
En este escenario, los pequeños comercios se ven en la necesidad de buscar un elemento diferenciador para posicionarse en un mercado global y en continuo crecimiento. Asociaciones como Acosevi les permite unirse a una red más amplia, tener un respaldo y una plataforma que les ayude a hacerse ver. "No te queda más remedio que subirte al barco e ir al paso que marcan los grandes", estima Ballina.
El presidente provisional de Acosevi fundó su negocio hace más de quince años y lleva desde 2010 en esta asociación. En 2018 decidió dar un paso al frente y entrar a formar parte de la directiva, aunque reconoce que nunca se imaginó que estaría al frente. "No tengo fecha de caducidad, seguiré aquí lo que haga falta pero espero que esto se mueva. Está claro que una asociación como Acosevi no puede desaparecer", afirma.
Lo que está claro es que la entidad seguirá inmersa en las numerosas actividades que realiza durante el año. Acaba de terminar la campaña del "Black Friday" y ya están inmersa en la organización de Navidad. Un ambicioso programa que requiere trabajo y esfuerzo. "Al final, todos los que estamos aquí lo hacemos por voluntad, no cobramos, pero es un trabajo importante", asevera Ballina, quien destaca también el "importante papel" que Acosevi desempeña en la actividad local. "Intentamos hacer cosas todos los meses. Es verdad que a veces nos gustaría poder hacer más, pero somos una asociación pequeña y llegamos hasta donde podemos", concluye.
