Vientos de paz en los colegios sierenses

Los niños de Carbayín Alto elaboran mil grullas de papel y los de la escuela Peña Careses celebran una suelta de palomas por la concordia

Los niños de la Pola, en el patio, antes de la suelta de palomas. | L. Palacios

Los niños de la Pola, en el patio, antes de la suelta de palomas. | L. Palacios / Luján Palacios

Luján Palacios

Los escolares de Carbayín Alto han estado de lo más atareados en los últimos días. No solo ellos: las familias y la comunidad educativa se han volcado para conseguir su objetivo de celebrar el Día de la Paz.

Entre todos han conseguido elaborar mil grullas de papel, que lucen colgadas de las aulas de educación infantil del centro en Areñes. Los pequeños conocieron así la leyenda japonesa de las mil grullas de la paz, que dice que quien pliegue un millar de estas aves con la técnica del origami, cumplirán sus deseos. Los niños cantaron y se maravillaron con la decoración de colores, y acto seguido salieron a cubrir una carrera solidaria por la paz entre Areñes y El Cuto, en Carbayín, con el objetivo de recaudar productos para el Banco de Alimentos. Cada participante tuvo que hacer una aportación de legumbres, latas, harina o aceite para inscribirse. Y, de paso, hacer visible la necesidad de echar una mano a los demás.

Vientos de paz en los colegios sierenses

Los alumnos de Carbayín, con sus mil grullas. / Luján Palacios

Los escolares de la escuela de Infantil Peña Careses de Pola de Siero, por su parte, festejaron la jornada con una chocolatada, juegos cooperativos y canciones. Para finalizar, celebraron una suelta de palomas para simbolizar el vuelo libre de la paz.