Una profesión que "tendrá el estatus de sumiller en el nuevo convenio de la hostelería regional" y que "necesita reconocimiento económico y social", porque "los escanciadores sois el alma de Asturias". En estos términos ensalzó esta tarde a los echadores de sidra el presidente de la patronal hostelera, José Luis Álvarez Almeida, en la entrega de los premios del concurso regional de escanciadores, celebrado en el Museo de la Sidra de Nava, y que se convirtió en un encendido alegato a la profesión.
Porque "con la llegada del AVE el turismo en tren se va a triplicar en Asturias, y el escanciado es la gran singularidad regional", y es necesario "poner en marcha cuanto antes los certificados de profesionalidad", para que los especialistas del sector estén "en el lugar que se merecen". Y para que, de paso, como señaló en el acto la directora general de Agroalimentación, Begoña López, "se empiece a pagar por una botella de sidra lo que vale, para que una botella a 3,50 euros deje de ser algo inexplicable".
Mejoras
Todo un llamamiento en pos de las mejoras necesarias para unos profesionales que este año se batieron en duelo en un total de 18 pruebas puntuables por toda la geografía asturiana. El año que viene serán 19, con la recuperación del campeonato de Navia, tal y como avanzó el coordinador del concurso, el naveto Saúl Moro.
En esta edición el ganador fue, por quinta vez, Salvador Ondó, seguido por Jorge Vargas, Wilkin Aquiles, Jonathan Trabanco, Pelayo Rodríguez, Alberto Truchado, Humberto Rey, Pablo Suárez, Rubén Campa y Antonio Sorca. En la categoría sub-25 resultaron ganadores Daniel Rujas, Alexander Gabriel y José Ramón. Todos ellos el "top" del rostro más visible de la hostelería regional.