La Universidad para mayores brinda con sidra en Nava

Doce alumnos de Luis Benito García culminan en el llagar Viuda de Angelón un curso sobre la historia y la cultura sidreras en Asturias

El grupo de alumnos del curso sidrero, en las instalaciones de Viuda de Angelón, en Nava.  | L. P.

El grupo de alumnos del curso sidrero, en las instalaciones de Viuda de Angelón, en Nava. | L. P.

Luján Palacios

Luján Palacios

El saber no tiene edad, y cualquier momento es bueno para aprender sobre la sidra y su cultura,recién nombradas patrimonio inmaterial de la humanidad. Un grupo de doce alumnos se han formado en los últimos meses en el curso "Historia y cultura de la sidra en Asturias", impartido en el marco del Programa para Mayores de la Universidad de Oviedo de la mano de Luis Benito García, y ayer culminaron la formación académica con una sesión práctica en el llagar Viuda de Angelón, en Nava.

"Después de tanta teoría, echamos el cierre con excusión y cata", señalaba García, profesor de Historia Contemporánea de la Universida de Oviedo, director de la Cátedra de la Sidra e impulsor de la candidatura que culminó con el reconocimiento del UNESCO. Con la idea de seguir organizando cursos y el plan de "poner en marcha algo potente desde la cátedra, aprovechando la distinción, con algo muy concreto sobre sidra, tecnología y ciencia", desveló.

Los participantes en el curso, procedentes del Campus de Mieres, se mostraban exultantes, porque "ha sido interesantísimo, hemos aprendido mucho y Luis Benito es un profesor excelente", afirmaban antes de conocer in situ las instalaciones, el proceso de elaboración y los llagares históricos de Viuda de Angelón.

"Yo me apunté porque en mi casa siempre se hizo sidra, teníamos pumarada y esto ha sido una forma de revivirlo", explicaba Marisa Rodríguez. Como ella, Soledad Álvaro se entregó con entusiasmo al conocimiento de la historia del caldo regional: "desde que los romanos trajeron la sidra a Asturias hasta las primeras espichas, las primeras botellas y vasos, cómo surgió la sidra achampanada... hemos aprendido de todo, es muy recomendable", aseguraba la alumna.

Y como estaban inmersos en el aprendizaje, vivieron con especial emoción el renonocimiento de la UNESCO. "Lo seguimos en directo, estábamos todos emocionadísimos", explican los alumnos entre risas. Ayer, como guinda al pastel, tocó brindar. Por supuesto, con sidra asturiana.

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