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José Julián Rodríguez Reguero

Recuerdo de la Bienal

A todos los que hicieron y hacen posible un reencuentro con el arte en Noreña

Tuvo que ser en los años setenta del siglo pasado cuando el cielo no respetó al Ecce Homo y llovió de forma inmisericorde durante todas las fiestas. "KiKe el Ruxu" y los demás miembros de la Cla el Corchu luchaban en las Escuelas Graduadas para intentar mantener fuera del agua las numerosas obras que competían en la Bienal de pintura. El edificio para la exposición estaba anegado y hasta el baile del Caldo se suspendió.

Aunque perdiéndose en el registro de la memoria colectiva de la villa, hace décadas que la Cla puso en marcha una iniciativa cultural, cuando estas eran muy escasas, que introducía el aliciente de la pintura en las fiestas. Calles y rincones de Noreña se llenaban de caballetes y curiosos.

La inestimable ayuda del pintor poleso Casimiro Baragaña hizo que los certámenes anuales fueran creciendo en el panorama artístico regional hasta su desaparición.

Cuando se inicia el siglo, la Asociación Contigo recupera la idea como homenaje a sus fundadores y acude a Casimiro para echar a andar. El soporte económico se obtiene de la iniciativa privada por lo que no se benefició al patrimonio artístico municipal.

Las últimas ediciones ya han salido a concurso como Premio Ayuntamiento de Noreña y las obras elegidas se pueden contemplar en diferentes edificios públicos como parte de nuestro patrimonio.

Este breve recordatorio viene a cuento porque los años pasan y las costumbres cambian en todas las actividades de la vida. Y mira por donde este año la Bienal, que estaba languideciendo, ha encontrado la forma de revitalizarse.

La magia llega de Internet. Este año la primera ronda para elegir las obras de la exposición y que aspiraban al premio, ha sido virtual. Esto no solo ha relanzado el número de artistas participantes sino que han concursado un número también mayor de otras autonomías así como pintores de Chile, Uruguay, Venezuela o Francia. Ojalá que esto sea el inicio de un Certamen Internacional de Arte en Noreña para 2023.

Mientras tanto, sea cual sea su ubicación final, la bella expresión dubitativa y penetrante de la pintora granadina Leonor Solans cuando era niña se integrará en nuestro imaginario con el paso del tiempo. En tiempo de crisis energética la cultura y el arte en particular pueden ser un buen combustible para la vida.

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