Crecer y la paradoja del barco de Teseo
Una revisión al paso del tiempo
El sendero que va desde la niñez hacia la edad adulta es una fina línea entre el progreso y la traición. El tiempo erosiona discretamente las ideas y los valores, sustituyéndolos por otros que responden a la realidad presente.
He vuelto a echarle un vistazo a mis cómics antiguos después de muchos años. Sin duda, en mi estantería destaca especialmente una saga romántica que comencé a coleccionar siendo preadolescente. En ella, se desarrollan los enredos y amoríos de un grupo de amigos de bachillerato hasta su entrada a la universidad. Recuerdo conversar apasionadamente con mi amiga todo aquello que nos había impactado en cada nueva entrega. Fantasear acerca de las personas que seríamos cuando tuviésemos la libertad de ser, y criticar duramente todo lo que considerábamos moralmente incorrecto. La inocencia tiene unas convicciones admirablemente firmes y lógicas. Esto se debe a la ausencia de conflicto.
Muchas cosas han cambiado desde entonces: nos hemos sorprendido a nosotros mismos cometiendo todos los errores posibles, enfrentando adversidades que nunca hubiésemos imaginado, y enorgulleciéndonos o decepcionándonos con nuestra forma de gestionarlos. Descubriendo nuevas sensaciones y atravesando estados de ánimo desconocidos. La relación entre la persona que soñábamos ser y la que somos puede ser una constante conversación, o un eterno olvido.
Cuando venimos al mundo, lo primero que aprendemos son los valores universales sobre los que deberíamos enraizarnos para llevar una vida en armonía con uno mismo y con los demás. Lo siguiente, es el concilio entre estos valores y las complejas dinámicas sociales. Pero finalmente, en la adultez, tras germinar nuestros propios intereses ¿qué hemos podido rescatar del niño que fuimos? ¿Qué permanece intacto y qué se ha perdido? ¿De qué ideas hemos prescindido para llegar a ser quienes somos? ¿Con qué las hemos sustituido?
- Ya hay condena para el conductor del accidente de autobús con cinco muertos en Asturias: 'No aceptaba su diagnóstico de epilepsia
- Bibiana Fernández se pronuncia públicamente tras la imitación de Yenesi en Tu Cara Me Suena
- Conmoción en Luanco por la muerte de Toño Caballero, la víctima del accidente laboral de Gijón: 'Era un trabajador nato y un apasionado de la naturaleza
- Una 'pandilla de héroes' en Avilés: la historia de unos jóvenes que evitaron una tragedia al despertar a los vecinos de un bloque en llamas
- Vivo un infierno burocráctico', clama el promotor de un parking para autocaravanas en Salinas
- El Intercéltico se muda en Avilés: cambia la Exposición por Pedro Menéndez para evitar litigios por el ruido
- Polémica en Avilés: Los artistas piden 'respeto' para la obra de Suárez en la estación de buses
- Otro zafarrancho de obras en el casco histórico de Avilés: Arranca la última intervención en el entorno de la iglesia de Sabugo