Molleda se sienta a la mesa por San Esteban

Los vecinos de Molleda clausuraron este domingo las fiestas sacramentales de San Esteban, después de tres días consecutivos de celebración. La de ayer dio comienzo con el lanzamiento de voladores, que a las 12.00 horas marcaron el inicio de la tradicional misa sacramental, oficiada por el párroco local y que estuvo ambientada por los acordes de la Banda de Música de Corvera, que cerraron la ceremonia con el himno nacional. Entre los numerosos asistentes a la jornada, destacó la presencia de varias familias al completo, que disfrutaron de una jornada en compañía de sus vecinos.

Tanto la misa celebrada en la iglesia de San Esteban como la posterior procesión congregaron a decenas de feligreses, que acompañaron al párroco y a la Banda de Música durante el trayecto. Cumplidas las 13.00 horas, el ambiente comenzó a crecer. Poco a poco, los vecinos de Molleda tomaron la carpa del recinto ferial para la sesión vermú que se complementó con las notas musicales de la Agrupación Musical de Corvera y la actuación del grupo Aroma. Al mismo tiempo, se celebró el reparto del bollo y la botella de vino para todos los socios de las fiestas.

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Frente a la carpa se ubicó uno de los espacios con más solera. Los más pequeños de la parroquia tenían a su disposición cuatro hinchables, uno de ellos con un gran tobogán de agua por el que se deslizaron una y otra vez. Como efecto colateral, madres y padres de los más jóvenes recibieron algún que otro baño como consecuencia de las salpicaduras provocadas por las caídas de sus hijas e hijos a la piscina final, causando más que una carcajada.

Tras la comida popular, que abarrotó las mesas del recinto, los romeros contaron el tiempo para la verbena final, que dio comienzo a las 19.00 horas de nuevo con Aroma, para despedir unas fiestas para las que ya se inicia la cuenta atrás hasta el año que viene.