Funeres (Laviana),
Miguel Á. GUTIÉRREZ
Un reguero de manchas difusas salpicaba ayer los senderos de Peña Mayor. La comitiva caminaba dispersa, pero el punto de encuentro era el mismo. El pozu Funeres, en Laviana, volvió a acoger, como cada año, el peregrinaje de decenas de militantes socialistas que recordaron a los 22 hombres represaliados por el franquismo que, en 1948, fueron arrojados vivos al interior de la sima. El acto en recuerdo de las víctimas -que contó, entre otros, con la participación de Javier Fernández, secretario general de la FSA- se convirtió en un llamamiento en favor de la recuperación de la memoria histórica.
En los prolegómenos del acto se rindió un emotivo homenaje a Luis Fernández Roces, veterano afiliado socialista fallecido recientemente. Las cenizas de Fernández Roces fueron arrojadas al interior de la sima por su hijo y su nieto, acompañados por familiares y compañeros de partido. Otro histórico militante del PSOE, Avelino Pérez, fue el encargado de recodar la figura de Fernández Roces, natural de San Martín y ex concejal del Ayuntamiento de Gijón. «Era un hombre íntegro y tolerante; recuerdo que fue en su casa donde se imprimió toda la propaganda de las huelgas de 1962 en el Valle. Fue un referente de socialismo que perteneció a esa generación de posguerra que hizo posible la recuperación de las libertades en este país», concluyó Pérez.
El recuerdo al militante fallecido dejó paso a los discursos políticos. Javier Fernández abogó por «hacer justicia» a través de la memoria: «En este país todavía hay personas que tienen miedo a recordar y otros que tienen miedo a que algunos recuerden; Zapatero no es un nieto de la ira, ni existe una afán de revancha, ni queremos romper en consenso de la transición. Podemos dejar la historia, pero no podemos dejar la justicia, no con los verdugos, sino con las víctimas».
Fernández también plasmó la necesidad de transmitir ese pasado a los jóvenes. «Podemos callarnos o podemos explicarles que costó sangre, sudor y lágrimas traer la libertad», apostilló. El secretario general de la FSA también ligó su argumentación a la polémica sobre la asignatura de Educación para la Ciudadanía. «¿No tienen derecho los jóvenes a ser educados en los valores de la democracia? Enseñar a respetar la tolerancia y la igualdad no es un adoctrinamiento político», aseguró Fernández, que criticó a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, por identificar Educación para la Ciudadanía con la antigua asignatura de Formación del Espíritu Nacional, impartida en el franquismo.
Ante cerca de 200 personas, el dirigente socialista también acusó al PP de tratar de «monopolizar el patriotismo» e invitó a los populares a sumarse a las «corrientes modernas» que siguen otros partidos del mismo signo ideológico en Europa. «La fragmentación de España, la persecución de la Iglesia o que el Gobierno traiciona al país forma parte del mismo discurso de hace 60 años, pero ese discurso ya no suena a tragedia, sino a farsa».
En la tribuna de oradores, Javier Fernández estuvo acompañado por el histórico dirigente Pablo García; el secretario general del PSOE de Laviana, José María Solís; el presidente de la agrupación local, Pepe Noja, y el secretario de las Juventudes Socialistas del valle del Nalón, Adrián Barbón. En la misma línea expresada por Fernández, todos ellos reclamaron un esfuerzo decidido para la recuperación de la memoria histórica.
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