José A. ORDÓÑEZ

Mieres / Langreo,

Diez y media de esta mañana. Sala de juntas de la Consejería de Industria. Hora y lugar para el inicio de las negociaciones sobre el reparto de los fondos mineros de infraestructuras que le corresponde al Principado en el presente ejercicio: 107,7 millones de euros, el 53,86 por ciento del total nacional. A la mesa, por parte del Principado, se sentarán los consejeros de Industria y de Infraestructuras, Graciano Torre y Francisco González Buendía, respectivamente. También estarán presentes las cúpulas del SOMA-FIA-UGT y de la Federación Minerometalúrgica de Comisiones Obreras (CC OO), así como el alcalde de Aller, el socialista Gabriel Pérez Villalta, en su calidad de presidente de la Asociación Comarcas Mineras (Acom), organismo que agrupa a los concejos carboneros españoles. El objetivo de las partes es claro, a tenor de las declaraciones previas al encuentro: llegar cuanto antes a un acuerdo de consenso que evite retrasos en la ejecución de unas obras que deben de tener como objetivo principal la creación de empleo en las Cuencas.

El experimentado Pérez Villalta ya dejó claro días atrás que todas las partes implicadas en la mesa regional de la minería «deben de haber aprendido la lección» de lo sucedido en el reparto de los fondos del bienio 2008-2009, con el objetivo de que, en esta ocasión, que no se produzcan desencuentros y retrasos. Entonces, con el proyecto del tren tranvía como principal escollo, Principado y sindicatos mineros no lograron consensuar la lista de las obras a financiar con los fondos de reactivación. Como consecuencia de la tormentosa negociación y de las demoras, a día de hoy todavía no ha comenzado ni una sola de las actuaciones firmadas entre el Gobierno regional y el Ministerio de Industria bajo un aluvión de críticas sindicales.

Aunque los precedentes no son halagüeños, José Ángel Fernández Villa considera que, en esta ocasión, no hay motivos para que se reproduzca una situación de conflicto como la del pasado bienio. En declaraciones a este periódico, el secretario general del SOMA-FIA-UGT se muestra convencido de que «no debería de haber problemas para alcanzar un acuerdo en un corto período de tiempo», toda vez que, según indica, «las prioridades están marcadas y la mayoría de los proyectos ya están identificados, con la elaboración de los proyectos y los estudios técnicos». A este respecto, el experimentado sindicalista recuerda que las principales prioridades del plan sectorial 2006-2012 son «la reactivación, la industria y el empleo».

Por su lado, Maximino Martínez, máximo responsable de la Federación Minerometalúrgica de CC OO, también garantiza que su organización acude a la reunión de esta mañana en Oviedo con la firme voluntad de «agilizar lo máximo posible el proceso de acuerdo, firma y ejecución» de los fondos mineros. «Por nosotros no va a quedar; queremos sentarnos cuanto antes y desbloquear el proceso para no seguir con la línea errónea del Gobierno de Asturias de dilatar la negociación y, sobre todo, de no buscar el acuerdo con los sindicatos para poner lo más rápido posible los recursos en funcionamiento», afirma García. El responsable de CC OO deja claro que las prioridades de su sindicato con respecto a las partidas de reactivación pasan por «la creación de suelo industrial de calidad, que cuente con buenos accesos y con las nuevas tecnologías, para permitir a los municipios de las Cuencas competir con el resto de Asturias».

Gabriel Pérez Villalta también considera que poner las bases para «la creación de empleo y evitar el éxodo de la población» debe de ser el objetivo fundamental de los fondos mineros de este año. Y, en este sentido, reclama la ejecución de obras de infraestructuras para permitir el desarrollo de unos municipios que, a su juicio, «todavía presentan carencias».