Mieres, J. E. M.

Las ayudas a la reactivación económica de los territorios mineros -subvenciones destinadas a impulsar nuevas actividades empresariales y, por tanto, la creación de empleo y nuevo tejido empresarial- buscan mitigar el impacto del ajuste minero, una reconversión de un sector que ha supuesto la eliminación de miles de puestos de trabajo desde su inicio. El sector minero comenzó a retroceder cercano ya el último cuarto del siglo XX entrando en una clara reconversión en los noventa, cuyo inicio vino marcado por el encierro de Barredo. En 1998, Madrid puso en marcha el primer plan minero, un documento que incluía inversiones para compensar la pérdida de puestos de trabajo.

El repaso por comunidades autónomas indica que el Principado ha captado 422,5 millones en ayudas empresariales del Plan de la Minería entre 1998 y 2007 para paliar la pérdida de 9.217 empleos en el mismo período; Castilla y León logró 256,6 millones en ayudas a la reactivación minera para mitigar los 5.596 puestos de trabajo que se llevó por delante la reconversión del sector hullero; Castilla-La Mancha recibió ayudas mineras por valor de 84,8 millones para asentar empresas y paliar la destrucción de 142 empleos mineros; Andalucía captó 84,6 millones de euros en subvenciones del carbón para nuevas actividades empresariales que compensaran el recorte de 468 puestos de trabajo en sus minas; Aragón recibió 125,7 millones entre 1998 y 2007 para generar empleo que paliara la pérdida de 1.026 puestos de minero; Cataluña logró 22,5 millones en ayudas mineras para empresas y perdió 196 empleos en el sector, y Galicia compensó la destrucción de 1.356 empleos con 85,1 millones en ayudas mineras.

Las cifras indican un reparto muy desigual entre territorios y una desproporcionalidad total entre el dinero que recibe cada comunidad autónoma y la cifra de empleos perdidos en el sector minero desde el año 1998.

La cifra de empleos que se anunció en las convocatorias de los fondos mineros fue de 7.195. Finalmente se pusieron en marcha 4.970.

Castilla y León

La vecina comunidad, la de mayor presencia minera tras Asturias, preveía generar 6.009 empleos y puso en marcha 3.927.

Aragón

La comunidad aragonesa esperaba desarrollar 2.547 puestos de trabajo. Al final, se han creado 1.712.

Galicia

En esta región, las empresas que recibieron ayudas del plan minero anunciaron la creación de 2.198 puestos de trabajo de los que tras concluir el plan se habían creado 1.332.

Andalucía

Las nuevas iniciativas pretendían generar 1.862 puestos de trabajo y crearon al final 754.

Castilla-La Mancha

En esta región, las ayudas mineras del anterior plan preveían asentar 1.269 puestos de trabajo. El último recuento dejó la cifra en 973.

Cataluña

En Cataluña se esperaba crear 915 empleos y tras concluir el plan se generaron 549