Rioseco, L. M. D.

La plaza del Ayuntamiento de Sobrescobio emuló en Nochevieja a la Puerta del Sol de Madrid y reunió a cientos de personas para despedir el año 2009 y recibir el 2010. La fiesta, organizada con motivo de la retransmisión de las campanadas de fin de año de la TPA desde Rioseco, continuó hasta la mañana en la cancha deportiva de la capital del concejo, donde hubo música y barra de bar durante toda la noche.

La televisión autonómica asturiana eligió Sobrescobio para despedir el año al haber recibido su comunidad vecinal el premio al Pueblo Ejemplar de la Fundación Príncipe de Asturias. Los preparativos para la fiesta llevaban varios días ocupando a los trabajadores municipales y a los técnicos de la televisión: todo debía salir perfecto. Para conseguirlo, hubo que arreglar el reloj de la iglesia, instalar una carpa, decenas de focos de gran potencia y pantallas planas para que los asistentes pudiesen seguir la retransmisión... Al final, hasta el tiempo acompañó, adelantando las lluvias para la tarde y dejando una noche despejada pero, eso sí, muy fría.

El ambiente comenzó a caldearse a partir de las once y media de la noche. A esa hora ya eran muchas las personas que se encontraban en la plaza. A los pocos minutos comenzaron a repartirse las botellas de sidra y las uvas. Diez minutos antes de que comenzaran las campanadas la plaza bullía de actividad: gente buscando copas y botellas para poder brindar, los rezagados sin uvas, curiosos viendo cómo trabajaban los presentadores de la TPA Pachi Poncela y Lía Beltrán... Los «tradicionales» cuartos -hasta ayer nadie los había escuchado nunca en el reloj de la iglesia de Rioseco- precedieron a las doce campanadas y a los habituales empachos de uvas, los brindis y los besos que vinieron a continuación.

Al igual que ocurre en la Puerta del Sol, en Rioseco hubo grupos de personas disfrazadas, pancartas y reivindicaciones para todos los gustos: Elvis Presley, payasos, jóvenes y no tan jóvenes que buscaban pareja para pasar mejor la noche, un grupo que buscaba «urogallos para museo» y «pareja para Mansín», gente que pedía soluciones para la empresa Alas Aluminium... todos ellos, además, perseguían a las cámaras de televisión para que su mensaje se difundiera más rápidamente por el mundo. El que sí pudo hablar de la labor que hacen las asociaciones coyanas fue David Cofiño, representante del Club La Panoya, que fue entrevistado por Pachi Poncela y Lía Beltrán al igual que el alcalde de Sobrescobio, Marcelino Martínez.

A las doce y media, los asistentes se trasladaron hasta la cancha deportiva, donde sobre un escenario un pinchadiscos puso música hasta el amanecer. A combatir el frío ayudaron los cañones de aire caliente y el bar, que se instaló en el extremo contrario al lugar que ocupaba el DJ La Noche. La fiesta puso el colofón a un año histórico para Sobrescobio, marcado por la visita de Don Felipe y Doña Letizia el pasado 24 de octubre para entregar a Sobrescobio el premio Pueblo Ejemplar de Asturias de 2009.