Madrid, Modem Press

El almacenaje del carbón, que continúa sin ser consumido por las eléctricas, se está convirtiendo en un grave problema para las empresas del sector minero que ven como su producción lleva meses apilándose en sus instalaciones hasta alcanzar varios millones de toneladas. Esta situación produce ya un serio problema de espacio físico donde poder continuar el almacenaje del enorme stock de mineral que hay en nuestro país y que compra Hunosa. Además, las inclemencias meteorológicas de este invierno, extremadamente frío y lluvioso, se ha convertido en un problema añadido para un carbón que, con las lluvias y las nieves, está sufriendo significativas mermas.

Por ello en el sector se esperaba con expectación las resoluciones del Consejo de Ministros de ayer en el que cabía la posibilidad de que el Gobierno aprobara el Real Decreto de Restricciones por Garantía de Suministro -ayudas al consumo de carbón español- que, aunque sigue siendo analizado por la Comisión Europea, cuenta ya con el aval del Consejo de Estado, que en su reunión plenaria del pasado 28 de enero dio el visto bueno al mecanismo creado por el Ministerio de Industria, que dirige Miguel Sebastián.

Moncloa ya ha decidido que aprobará el Real Decreto sin esperar al dictamen de la dirección de la Competencia de la Unión Europea toda vez que la resolución podría demorarse algún tiempo y ante la disyuntiva de tener que prorrogar el mandato a Hunosa de comprar la producción de las empresas privadas y, por tanto, aprovisionar a la empresa pública asturiana de fondos adicionales a los 166 millones de euros ya gastados. Diversas fuentes fijaban el Consejo de Ministros de ayer como la fecha señalada por el ejecutivo para dar el visto bueno a estas ayudas, pero la decisión aún se hará esperar.