Santiago de Compostela

El presidente de la Xunta, el popular Alberto Núñez Feijóo, «celebró» ayer la decisión del Tribunal de Luxemburgo de paralizar la aplicación del real decreto que prima el consumo eléctrico con carbón nacional, un documento que castiga a las térmicas gallegas, preparadas para quemar carbón de exportación. «Lamento que sean finalmente los tribunales los que tenga que frenar las injusticias del Gobierno central», señaló el dirigente del PP en una comparecencia posterior a la reunión del consejo de la Xunta. Además, el dirigente gallego afirmó que confía en que el Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero «acepte» ahora que hay que «cumplir» las leyes y «reflexione sobre el trato injusto que está dando a unas 3.500 familias gallegas».

En todo caso, Núñez Feijóo se reafirmó en que Galicia no actúa «sin razones jurídicas» cuando interpone un recurso contra una norma que considera « claramente injusta». El responsables del PP insistió en que su Gobierno no actúa «contra nadie», sino que defiende los «intereses» de los ciudadanos de la comunidad. El presidente de la Xunta ha mantenido durante todo el proceso de gestación del real decreto que el Gobierno central ha utilizado la crisis del sector para favorecer los incentivos al carbón «con fines electoralistas»