Mieres del Camino,

Julio VIVAS

El Centro Europeo de Soft Computing de Mieres ha desarrollado un proyecto para mejorar globalmente la productividad de la planta de Nissan en Barcelona, donde existe una línea de montaje en la que se fabrican los vehículos. El proyecto resultó premiado en el VIII Congreso Español de Metaheurísticas, Algoritmos Evolutivos y Bioinspirados, celebrado en Albacete entre los días 8 y 10 de febrero.

Uno de los impulsores del proyecto es el investigador del centro de Soft Computing, Sergio Damas, en colaboración con Óscar Cordón y Manuel Chica -investigadores del mismo equipamiento- y Joaquín Bautista, de la Cátedra Nissan, con la que colabora el centro de Mieres desde hace cuatro años. Damas explica que la iniciativa «plantea el empleo de una serie de técnicas de soft computing que sirven para mejorar la productividad de la planta». Para ello, los investigadores estudiaron «de qué manera se agrupan las tareas, teniendo en cuenta que entre ellas hay algunas que tienen que realizarse antes que otras. Depende de cómo se agrupen, puedes encontrarte con mejor o peor rendimiento».

Sin embargo, la agrupación de tareas no es la única variante del análisis que realizan los investigadores. «También introducimos la necesidad de espacio que tienen los operarios, con la intención de que se resuelva el problema de una forma más realista», señala Damas, quien detalla que «nos encontramos con un escenario en el que en la línea de montaje se producen diferentes tipos de motores para distintos modelos. Aquí es donde entran las técnicas de soft computing para el mejor ordenamiento de tareas y necesidades de espacios asociados a cada una de ellas». Las técnicas de soft computing «aportan diferentes configuraciones de la planta asociadas a cada tipo de productos que se ofrecen de manera simultánea, en comparación con las técnicas clásicas».

El investigador del centro europeo de Soft Computing señaló que, a pesar de ser un proyecto, «es muy probable que Nissan aplique el modelo, como ha ocurrido ya con otras iniciativas que hemos llevado a cabo con anterioridad». En este caso, los resultados obtenidos «han sido bastante satisfactorios, consiguiendo un incremento considerable de la eficacia, siempre en función de las necesidades de la planta». Además, gracias a la colaboración con la Cátedra Nissan, los investigadores de Soft Computing han contado en todo momento con datos reales de la factoría catalana, convirtiéndose en un trabajo totalmente adecuado a la situación real de la planta de Barcelona.