La mayoría de los días de pre y campaña electoral «eufóricamente» algunos medios de comunicación nos «apasionan» con informaciones que algunos portavoces de los partidos políticos les exponen sobre las presuntas corrupciones ejercidas con los fondos públicos y las subvenciones.

Parece ser, que las campañas electorales se quieren aprovechar para las descalificaciones personales e intentar configurar la percepción del lector en beneficio de unos o de otros, es decir, sacar rentabilidad electoral de dichas descalificaciones.

Mal interpretaríamos la realidad de los hechos si creyésemos que toda supuesta corrupción practicada para recibir las ayudas y las subvenciones públicas con métodos irregulares deban salir a la luz pública en periodos electorales, como si la transparencia política fuese patrimonio de las comunidades que están inmersas en los comicios electorales.

El parlamento es el lugar en el cual todos los parlamentarios pueden ejercer el derecho ha exigir la investigación para que salgan a la luz todas las supuestas corrupciones y las personas que las hayan cometido. La transparencia política debe ser patrimonio de todos y, fundamentalmente, de nuestros parlamentarios y no de los periodos electorales.

Andalucía con las irregularidades de los ERES. Asturias con el «Caso Marea» y, por ultimo, la presunta relación del señor Cascos con el caso «Gurtel». Parece ser que algunos de nuestros políticos, amparados en estos supuestos hechos, les interesa más «el cotilleo» en campaña electoral que el presentarnos un proyecto claro y convincente para sacarnos de la crisis que estamos padeciendo y que, en definitiva, es lo que verdaderamente nos interesa. Los temas de la corrupción que mutuamente se reprochan soluciónenlo ustedes en el parlamento.

Imagen lamentable dejan quienes quieren gobernar nuestra comunidad con campañas de descalificaciones bochornosas e impropias de quienes tienen que llevar el timón del barco para salir de la difícil situación que atravesamos y lamentablemente pierden el tiempo en mutuos reproches.

Unos y otros, están demostrando con estas actitudes de reproches mutuos la falta de capacidad que tienen para resolver los problemas fundamentales (que por cierto son muchos) a través del dialogo respetuoso, tal como se debe ejercer en una sociedad inspirada en los principios democráticos y converger en formulas para superar la crisis que estamos padeciendo. ¿Es que no han tenido tiempo durante todo el año para desenmascarar a quienes supuestamente están involucrados en malversaciones de subvenciones y otros fondos públicos que esperan hacerlo en periodo electoral? ¡Claro que sí, que tiempo han tenido! ¿Por qué no lo han hecho?? (¿??)

Cauces políticos, administrativos y jurídicos existen durante los 365 días del año para las denuncias de las supuestas corruptelas que unos y otros hayan cometido. ¿De qué nos sirve a los ciudadanos que en una campaña electoral empiecen a tirar de la manta sacando supuestos trapos sucios de estos y aquellos y cuando están gobernando ponen los mayores obstáculos para impedir la investigación de las supuestas irregularidades cometidas por empresas que reciben las subvenciones públicas con la supuesta complicidad de «personajes» públicos? ¿Quieren ustedes ejemplos y pruebas?? (¿??) Ejemplos y pruebas existen muchos y muchas, pero, por ética política y por respeto a todos/as ciudadanos/as estén o no estén vinculados/as a las diferentes formaciones políticas, pero, que si podrían pensar que el relato estaría inspirado con los mismos principios y propósitos que algunos de «nuestros» políticos están practicando en esta campaña electoral: confundir al ciudadano para situarlo en el camino de la duda y posiblemente sentirse indeciso en el ejercicio de su importante e imprescindible voto.

Esperemos que la prudencia se impregne en el sentido común de quienes orientan y desarrollan en los diferentes partidos los métodos aplicar en la campaña electoral y se inspiren en la defensa de los programas electorales que unos y otros presentan ante el pueblo asturiano. El pueblo asturiano, en unos niveles de crisis tan profunda, (casi 100.000 parados) no puede permitir que sus políticos continúen echando balones fuera, porque seria una absoluta vergüenza.

Pasadas las elecciones y constituido Gobierno y Parlamento, tiempo tendrán ustedes, para ejercitar acciones políticas y administrativas, así, como también, investigar y aclarar las responsabilidades que unos y otros hayan tenido en la supuesta relación del señor Cascos y el PP con el «Caso Gurter» y la supuesta relación del PSOE con los regalos del «Caso Marea», ya que son los relatos que «eufóricamente» nos comentan en los medios de comunicación (estos días), expuestos por ustedes.

Ustedes, y nada más que ustedes, son los únicos culpables del supuesto deterioro que dejan de su propia imagen, por los «bochornosos» enfrentamientos personales y los comentarios vejatorios que mutuamente se reprochan los unos y los otros.

Mírense ustedes al espejo, reflexionen y pregúntense: ¿Qué diferencia se percibe entre ellos y nosotros?