Mieres del Camino,

J. A. GAYOL

Seguridad ciudadana y personas mayores. Ese era el contenido de la charla organizada por el Club LA NUEVA ESPAÑA en colaboración con la Asociación de Viudas de Mieres. El acto tuvo lugar en un abarrotado salón de actos de la Casa de Cultura de Mieres donde las explicaciones corrieron a cargo de Juan Luis Nepomuceno, delegado de Participación Ciudadana de la Comisaría de Mieres. Estuvo acompañado Nepomuceno por Fidel Castañeda Ibáñez, Jefe de la Comisaría de la Policía Nacional en Mieres.

Juan Luis Nepomuceno aludió al programa «Policía Mayor», que consiste en «intentar prevenir los delitos que se comenten con las personas mayores, que somos cada vez más». El agente explicó que «las personas mayores requieren una atención personalizada por parte de la Policía porque, aunque como colectivo no es de los que más delitos sufre, sí es cierto que alguna clase de delincuentes tienden a actuar aquí». En este sentido, la Policía ha puesto en marcha diversas campañas de información destinadas a las personas mayores. Mediante el programa «Policía Mayor» se trabaja en la protección de este colectivo y «se procura fomentar la información y la prevención de delitos, así como enseñar a cumplir un mínimo de medidas de autoprotección».

Nepomuceno continuó su charla señalando que en el domicilio familiar «se dan determinada clase de delitos como los "suplantadores", que se hacen pasar por miembros de un organismo público -como el Ayuntamiento o la Seguridad Social-, o de una entidad privada, como un representante de la suministradora de agua, luz, teléfono o gas». En estos casos, según afirmó el agente, «no se debe entregar cantidad alguna de dinero, ni enseñarles la cartilla bancaria ni ningún otro dato. No se debe dejar entrar a personas desconocidas y hay que llamar al número oficial de la compañía y no al que ellos le pudieran facilitar». También apuntó que, en caso de tener que firmar algún documento, «es mejor hacerlo delante de una persona de confianza, familiar o amigo».

Entre otras recomendaciones, el agente señaló que era preferible «instalar puertas de seguridad con mirilla y no abrir la puerta del portal. Si se pierden las llaves, es necesario cambiar lo antes posible la cerradura, y contactar con la Policía cuando algo inquiete por sospechoso o poco habitual». El conferenciante también aludió a delitos, como el abandono o el trato degradante físico o psíquico, que puede darse contra personas mayores en situación de dependencia. Por último, el agente aludió a los delitos que se pueden producir en la calle, como el timo de la estampita y el del tocomocho.