Langreo, J. A. VEGA

Diecisiete cuentos vistos a través de un caleidoscopio y escritos con manos de mujer. La escritora lenense Paula Pulgar presentó, en Sama, su libro de relatos escrito en asturiano en acto organizado por el colectivo sociocultural de mujeres Les Filanderes en colaboración con el Club LA NUEVA ESPAÑA en las Cuencas.

La escritora estuvo acompañada de Asunción Naves, presidenta de Les Filanderes, y Esther Prieto, directora de Ediciones Trabe que ha publicado el libro. Naves agradeció la presencia de la escritora en Langreo y recordó el buen recuerdo que dejó en el colectivo «Calidoscopiu», relato que da título al libro y que fue premiado en la octava edición de su concurso de relatos «Filando Cuentos de Mujer».

Esther Prieto aprovechó la presentación para lanzar un reto a la escritora: escribir una novela en asturiano. Y lo dijo porque solo hay dos novelas escritas en asturiano por mujeres. Prieto hizo un rápido recorrido por los escritores del Xurdimiento asturiano entre los que no había ninguna mujer en los años 70 y primeros 80. La representación femenina aparece en la segunda generación como un proceso natural de incorporación a todos los sectores, destacando, entre otras Berta Piñán o Lourdes Álvarez. La editora mostró su preocupación porque en la tercera generación hay pocas mujeres que escriban en asturiano. Esther Prieto señaló que Paula Pulgar tiene «una manera de escribir madura, a pesar de su juventud» y por eso la emplazó para que escriba la novela en asturiano del siglo XXI. Y puso como ejemplo «Calidoscopiu» porque está escrito con una forma de narrar que podría ser novela.

Paula Pulgar confesó que a pesar de no ser consciente cuando iba escribiendo, la mayoría de los personajes son mujeres, «sobre todo las protagonistas» . En relación a los géneros literarios, confesó que «me encuentro a gusto en los relatos cortos, en las distancias breves». Leyó el microrrelato «El viaje» una de sus primeras obras escritas en asturiano hace nueve años. Y no lo hizo al azar porque las personas que se mueven a otros territorios se han convrtido en una temática repetida en sus textos, lo mismo que la muerte y los personajes oscuros.

La escritora escribe historias sobre la crueldad de unos personajes normales en apariencia y piensa que «lo que los une es la dureza de la vida».

Preguntada por el público habló con más detenimiento de los relatos «Calidoscopiu» y «Extractos del diaro de viaje de Pennie Sue Fernández». En el primero, el caleidoscopio es un símbolo, una metáfora de que se puede salir adelante, algo que la protagonista descubre en Londres. Un viaje a Marrakesh es el punto de partida del segundo en el que una joven acompañada de u viejo descubre que tiene una deuda pendiente.