Gijón, M. C.

El secretario confederal de acción sindical de USO, José Vía Iglesias, abogó ayer por finalizar la huelga en la minería del carbón y sentarse a negociar con el Ministerio de Industria las ayudas para el periodo 2013-2018. Según Vía Iglesias, la viabilidad del sector está garantizada «mediante el trasvase de parte de los fondos mineros destinados a reindustrialización y formación a las empresas productoras, oferta que puso encima de la mesa de negociación el propio Ministro el mismo día en el que comenzaba la marcha minera a Madrid». USO tiene un 10% de representatividad en el sector en España, si bien es mayoritario en la Hullera Vasco-Leonesa y tiene una representación significativa en la mina de Cerredo.

Vía arremetió ayer en rueda de prensa contra el SOMA-FITAG-UGT y la Federación de Industria de CC OO, a los que acusó de estar prolongando el conflicto para defender sus intereses sindicales y los del empresario minero Victorino Alonso, al que tildó de «mafioso», en lugar de los intereses de los trabajadores. Según USO, el rechazo de los sindicatos a la propuesta del Ministerio se debe «a que una parte de las ayudas que se tendrían que trasvasar para garantizar el cobro de los salarios de los trabajadores, son las que ahora el Gobierno destina a financiar al SOMA y a CC OO mediante fondos de formación y el pago de gastos corrientes en las sedes de los sindicatos, incluido el salario de alguna secretaria».

USO sostiene que es imprescindible negociar ahora la inclusión de fondos mineros en los presupuestos del Estado 2013 y 2014, que deberá visar la Unión Europea. El sindicato minoritario considera viable mantener los 656 millones de euros para el sector, previstos para este año. En cuanto a las ayudas a las empresas, que pasaron de 309 millones en 2011 a 111 este año, la propuesta que defiende USO en línea con el Gobierno es que esta última cantidad se engrose con el trasvase de entre 75 y 80 millones de la partida destinada a la reindustrialización de las comarcas mineras, con lo que la reducción de las ayudas a las empresas pasaría de un 63% a un 15% o un 20% este año y también entre 2013 y 2014. De ahí a 2018, la reducción se incrementaría hasta su total supresión.

El secretario general de USO Asturias, Francisco Baragaño, quiso mostrar su desacuerdo con algunas de las declaraciones de Vía Iglesias. Se trata de las referidas a que el fondo del conflicto minero sea la financiación de los sindicatos con los fondos, «pues imagino que los dineros tendrían una clara y perfecta justificación, y pasarán auditorías». Tampoco se mostró conforme con la denuncia de que los otros sindicatos utilicen las partidas de formación e industrialización para su propia financiación, «como si tuvieran ese poder en menoscabo de la democracia, cuando libremente se convocan elecciones».