Langreo / Mieres, L. M. D.

Los huelgas mineras se reavivan también en Asturias. Los trabajadores de la mina a cielo abierto de Cerredo, perteneciente a la empresa Coto Minero Cantábrico, propiedad de Victorino Alonso, han acordado paros ante los «recortes en los salarios» que afectarán a los trabajadores. De esta forma, los mineros de la explotación a cielo abierto serán los primeros de Asturias en volver a la huelga y seguirían a los de Uminsa en León, que han convocado un paro indefinido a partir del próximo martes.

Los empleados del cielo abierto de Cerredo denuncian que, con las condiciones de trabajo impuestas por la empresa tras la vuelta al tajo tras el final de la huelga indefinida en el sector, se les aplicaría una serie de reducciones salariales que supondría una merma en los ingresos de 200 euros al mes. Según los trabajadores, los relevos se organizarían con «seis días trabajados y tres de descanso», lo que «nos haría perder mensualmente entre cinco y seis jornales». La empresa también «hace que nos quedemos sin vacaciones, y no asegura el empleo a partir del año que viene». Los trabajadores de la mina a cielo abierto de Tormaleo (Ibias), también del grupo Alonso, decidían ayer, en una asamblea que comenzó pasadas las ocho y media de la tarde, y que aún no había finalizado al cierre de esta edición, si convocaban huelga.

Donde no se secundará la protesta será en la mina subterránea de Cerredo. Moisés Díaz, del comité de Coto Minero Cantábrico en esta explotación, señaló que por el momento no se están planteando retomar las movilizaciones. Díaz explicó que, teniendo en cuenta la situación actual de la plantilla, «en la que la mitad está trabajando de nuevo y la otra mitad están de vacaciones, no sería razonable convocar movilizaciones», indicó Díaz.

Los trabajadores de Uminsa en León decidieron, en una asamblea celebrada en la tarde del lunes, ir a la huelga desde el martes día 14 de agosto a causa de la reorganización del trabajo dispuesta por la compañía, que al igual que Coto Minero Cantábrico es propiedad del leonés Victorino Alonso. Según los mineros, Uminsa ha introducido nuevos turnos de trabajo que suponen una rebaja salarial para buena parte de la plantilla, sobre todo para aquellos que trabajan en el cielo abierto de Jarrinas. La documentación necesaria para convocar la huelga se presentó el pasado martes en el Servicio de Relaciones Laborales (Serla) de la Junta de Castilla y León. La protesta se iniciará el próximo martes, cumplido el plazo de cinco días laborables establecidos por Ley. Los trabajadores, eso sí, están «dispuestos a negociar» con la dirección de la empresa la desconvocatoria de la huelga, siempre y cuando respeten las condiciones laborales previas al inicio de la protesta indefinida que se convocó el pasado mes de mayo y que duró hasta la semana pasada.

La huelga convocada en Uminsa afectaría a los 400 trabajadores de la empresa en León, que se distribuyen entre los pozos de Santa Cruz y Alinos, en el cielo abierto de Jarrinas y en el lavadero Alicia de Fabero. Las condiciones laborales impuestas en los centros de trabajo de Uminsa en León son similares a las del cielo abierto de Cerredo, en Asturias.