Mieres del Camino,

D. MONTAÑÉS

El presidente en funciones de la asociación de comarcas mineras Acom-España, Ángel Calvo Fernández (PP), anunció ayer en Mieres que dejará el cargo en un mes. Lo hizo en el transcurso de una reunión de la comisión permanente de la asociación: «No quiero ser un estorbo para nadie y la actual situación es insostenible», afirmó.

Ángel Calvo indicó que convocará una asamblea general a finales de mayo para abordar la renovación de los órganos de gobierno. Dejó claro que no tiene intención de presentarse al cargo. El alcalde del municipio leonés de Páramos del Sil lleva como presidente en funciones de Acom desde octubre de 2011, cuando las disputas del PSOE y del PP sobre los estatutos impidieron elegir un nuevo presidente. Durante estos meses Calvo ha estado sometido a grandes presiones, manteniendo un discurso duro contra el tratamiento que el Gobierno de su partido está dando a la minería. Además, ha tenido que sofocar incendios dentro de la propia plataforma. Hace un par de meses se opuso a la decisión de los alcaldes socialistas asturianos de constituir un colectivo al margen de la asociación española para velar por los intereses del sector minero.

La decisión de Ángel Calvo de echarse a un lado puede reabrir las disputas internas por hacerse con el control de Acom-España. En la asamblea que se celebrará en un mes, además de elegir nuevo presidente, deberán aprobarse unos nuevos estatutos, un punto de fricción entre dirigentes de PSOE y PP. El equilibrio de fuerzas entre los dos partidos mayoritarios, ahora mismo, está en 50 alcaldes favorables a las tesis del PSOE y 40 a las del PP. Los primeros quieren que las decisiones queden avaladas por un apoyo de mayoría simple, mientras que los segundos abogan por seguir con el actual modelo, que exige contar con dos tercios de los votos. En octubre de 2011 el PSOE presentó una candidatura encabezada por Marcelino Marcos Líndez, entonces alcalde de Tineo, mientras que el PP hizo lo propio con José Luis Fontaniella, regidor de Cangas del Narcea. No hubo manera de encontrar un punto de acuerdo.

A la espera de lo que los aspirantes a la presidencia de Acom se posicionen de nuevo, la comisión permanente de la asociación se reunió ayer en Mieres para analizar la situación actual de la minería. La reunión de los alcaldes dejó varias reflexiones, ninguna de ellas amparada bajo argumentos optimistas. Culparon directamente al Gobierno central del PP de la «dramática» situación en la que se encuentra el sector. Aseguraron que las reuniones mantenidas con la secretaría de Estado de Energía han sido «decepcionantes» y lanzaron varios mensajes al Ministerio de Industria. El primero fue que, según ha podido recabar la propia asociación, «en Europa no exigen el cierre de las minas, lo que piden es que se ordene la actividad». Por ello, reclamaron al Ejecutivo estatal que presente cuanto antes el plan de cierre de minas no competitivas exigido a nivel comunitario para establecer el marco de gestión del sector hasta 2018. «Nos han dicho que sin esta planificación España corre el riesgo de quedarse sin ayudas a la reactivación a partir de 2018», señaló la alcaldesa de Villablino, Ana Luisa Durán.

El Gobierno de España aún no ha trasladado a la UE el plan de cierre de minas. Así lo confirmó la pasada semana el jefe del Gabinete del Comisario de la Competencia, Carlos Martínez-Mongay, a los portavoces de Acom-España. Ana Luisa Durán remarcó ayer que ese documento es clave para elaborar un nuevo marco de ayudas a la producción y también para la reactivación. El Comisario de la Competencia sostiene que este plan hará posible que, a partir del 2018, «España pueda acceder a ayudas para posibilitar el futuro de las comarcas mineras, financiadas al 100%» por la UE» . Pues bien, los alcaldes mineros acusaron ayer al Gobierno de España de poner en peligro este programa de inversiones. «Europa requiere conocer esta hoja de ruta, que será necesario respetar para poder acceder a las ayudas», señaló Durán. La alcaldesa de Villablino, remarcó que «no es en Europa» donde está el «enemigo del sector del carbón», sino que «está en casa, y es el Gobierno de España, que no tiene voluntad política de arreglar un problema que tiene encima de la mesa».

Por su parte, Ángel Calvo puso énfasis en subrayar la dramática situación en la que se encuentran las familias de los cientos de mineros de las explotaciones privadas que llevan meses en sus casas. «Hay familias que no ingresan un suelo desde hace cuatro meses y algunos ayuntamientos reparten comida para los que no tienen que comer». Calvo puntualizó que llegados a este punto Acom sólo puede aspirar a «ser una mosca cojonera» para el Gobierno.