El nuevo Hospital Vital Álvarez Buylla iniciará mañana su actividad con la apertura de las consultas de rehabilitación, el primer servicio que se ha trasladado a las instalaciones construidas en Santullano, que han supuesto una inversión de 57 millones y cuyas obras arrancaron en 2007.

Según ha informado hoy la Consejería de Sanidad, el próximo lunes entrará en funcionamiento el gimnasio y posteriormente se irán trasladando el resto de los servicios a lo largo de los próximos tres o cuatro meses en función de las necesidades asistenciales.

El nuevo centro sustituirá al hospital mierense construido en la década de los años 50 del pasado siglo cuya estructura física y antigüedad no permitían el desarrollo adecuado de su oferta de servicios, especialmente en la modalidad asistencial ambulatoria.

El Álvarez Buylla dará servicio a 67.000 habitantes, fundamentalmente de la cuenca del Caudal, que serán atendidos por una plantilla de más de 680 profesionales y las instalaciones cuentan con una superficie construida de 28.000 metros cuadrados y disponen de 120 habitaciones, así como de un aparcamiento subterráneo con capacidad para 500 plazas.

El centro, cuyas obras fueron financiadas en parte por el Banco Europeo de Inversiones (BEI), permitirá ampliar y mejorar la actual oferta de servicios, que incluirá nuevas prestaciones como la diálisis, además de unificar servicios que se venían prestando en distintas ubicaciones como rehabilitación y diagnóstico por imagen.

El bloque de hospitalización incluye cinco unidades de 19 habitaciones (95 habitaciones), una unidad de 17 habitaciones en materno-infantil y una de ocho en psiquiatría, mientras que el quirúrgico incorpora un quirófano más que el actual al pasar de cinco a seis, una sala de técnicas especiales y una unidad más para el trabajo del parto y la recuperación, que pasa de dos a tres.

El área de consultas externas y gabinetes, además del crecimiento bruto en 18 nuevos espacios, ganará en eficiencia dado que los 27 actuales se encuentran ahora en tres edificios distintos mientras la de diagnóstico por imagen contará con ocho salas en las que se instalará una resonancia magnética, un TAC y cinco salas de rayos.

Además dispondrá de una unidad de hemodiálisis de la que hasta ahora carecía el área sanitaria de la cuenca del Caudal y podrá absorber a la mayor parte de pacientes con insuficiencia renal crónica residentes en la comarca.

El área de urgencias presenta como principal novedad una unidad de observación que triplica la capacidad actual, con 19 boxes más y se ha concebido para estancias de 48 horas mientras que ahora es de menos de 24 horas con el objetivo de evitar hospitalizaciones de tipo convencional innecesarias.

Según Sanidad, aunque de manera provisional se han modificado ligeramente la accesibilidad al nuevo hospital, se está tramitando la ejecución de una glorieta y una reordenación de los tráficos que permitan una adecuada accesibilidad al centro.

El actual hospital de Mieres contabilizó el pasado año 122.367 consultas de especialidades, 6.917 ingresos y una estancia media por ingreso de 6,4 días con una ocupación del 78 por ciento.