"Que la sangre que corra por nuestras espadas sea siempre la del enemigo". Así presentó el druida Nisarius (Silvino Torre) el pacto entre tribus que tuvo lugar en la mañana de ayer en Carabanzo. La localidad lenense es estos días (con motivo de la celebración del Festival Astur-Romano) Carabantium, un pequeño poblado astur a punto de ser invadido por las legiones. Están más preparados que nunca, con una fortificación que protege sus dominios y con la que tratarán de cambiar el rumbo de la Historia. Hoy será el día de la gran batalla y, por eso, ayer tocó coger fuerzas. Más de trescientos guerreros, llegados de tribus trasmontanas y cismontanas, se dieron cita en Carabanzo para hermanarse y preparar la lucha contra las legiones.

El día amaneció nublado y con aires de guerra en el poblado. Nisarius desempolvó el pergamino y leyó con voz grave la proclamación del pacto. Un hermanamiento, explicó, para alcanzar "la libertad de los pueblos aplastados por Roma". Cada uno de los grupos clavó su espada formando un círculo, justo antes de invocar a los dioses a través del fuego y las semillas guardadas desde la última cosecha. Es un ritual de protección.

Armados con el arrojo que les dan los dioses y al son de la música para preparar la guerra, los astures protagonizaron un desfile desde el poblado hasta la carpa de la fiesta. Nisarius dirigió el hermanamiento, que contó con la presencia del "caudillo" de los astures de Carabantium: el alcalde de Lena, Ramón Argüelles. "Esta batalla la vamos a ganar", afirmó el regidor desde el escenario, con un optimismo que parece anunciar un cambio en la Historia. También agradeció la labor de la organización, que corre a cargo de todas las asociaciones vecinales de la localidad. La recreación cuenta con la coordinación de la Asociación Lucense de Tiempo Libre.

El ambiente está caldeado a la espera de la batalla de hoy, que empezará a las dos de la tarde. El público no se pudo reprimir. Hubo aplausos para los guerreros astures y hostilidad para los legionarios invasores. El enfrentamiento de este año será más feroz y con un campo de batalla lleno. Se verán las caras en Carabantium guerreros de la Asociación de Guerras Cántabras; la Guardia Pretoriana de Lugo; Legión V Alaudae de Mieres; Hijos del Lobo; Hermanos de Armas de Arnedo, de La Rioja; los también lucenses A Castronela y Lucus Équites; Ludus Bergidum Flavium, de Cacabelos; y Gaebolgh, de Vallecillo. A su paso por el escenario, agradecieron la invitación y motivaron a los organizadores en su continua labor por hacer más grande esta fiesta.

La sangre empezó a correr por la tarde, cuando los legionarios se cobraron las primeras víctimas. Al silencio de la noche y con el calor de las antorchas, el poblado enterró a uno de sus guerreros (David García) dentro del poblado. Aliviaron las penas con la "Nueche Astur", que tenía programados los conciertos de "Skontra", "Spanta la Xente" y "Dixebra". DJ Nacho Otero alargó la fiesta.

No pudieron quedarse todos hasta el final, porque la batalla de hoy se presenta muy dura. Mientras la música llenaba Carabantium y el brebaje mágico corría por las venas de algunos, los guerreros afilaban la espada a la espera de la lucha.