El Ministerio de Sanidad destinará el próximo año más de un millón de euros para rematar en Langreo la construcción del Centro Stephen Hawking para personas con graves discapacidades neurológicas, que será de referencia nacional.

No obstante, la secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, no ha querido adelantar hoy una fecha en la que podría iniciar su actividad este centro, que debería haber estado finalizado hace tres años.

El compromiso de inversión fue trasladado hoy por el Ministerio en el encuentro que mantuvo Susana Camarero con la consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, y el alcalde de Langreo, Jesús Manuel Sánchez, para avanzar en la finalización de estas instalaciones.

Al término del encuentro, Varela ha señalado que Langreo y España sí que tendrá finalmente un centro de referencia estatal en el que, además de prestarse atención a enfermos, se investigará.

Ha reconocido que la secretaria de Estado no quiso avanzar una fecha "por temor a no poder cumplirla, pero que sí se ha constatado el compromiso existente por seguir avanzando en la finalización de este centro, que debería haber estado acabado en noviembre de 2012.

"El compromiso es avanzar en el menor espacio de tiempo para hacer de verdad un centro de referencia estatal", ha señalado la consejera, que ha destacado el buen clima con el que se ha desarrollado esta reunión para impulsar unas obras y puesta en marcha para el que el Inserso dispone de presupuesto el próximo año.

Sobre este punto, el Imserso ha señalado en un comunicado que el Ministerio ha incluido en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado del año vienen una serie de partidas para hacer realidad el centro y que éstas superarán el millón de euros.

Con esas partidas, la inversión del Estado en este centro de discapacitados se habrá elevado a más de 13,6 millones de euros.

La secretaria de Estado se ha comprometido a "acabar cuanto antes" este centro, que empezó a levantarse en noviembre de 2009 y que vio dificultada su conclusión por la quiebra de la constructora encargada de las obras y por una serie de anomalías en la estructura.

De hecho, el Ministerio ha trasladado al Gobierno asturiano que la empresa pública TRAGSA, que se está encargando de la fase final de la edificación, ha detectado una serie de deficiencias en la estructura que van a obligar a tramitar una segunda encomienda de gestión, a sumar a la primera, a la que ya se han destinado más de un millón de euros.

Con esa inversión se han contratado ya los suministros de agua y electricidad, se ha contratado el servicio de vigilancia y se ha desbrozado y limpiado la parcela, entre otros trabajos, que han detectado también la necesidad de reponer los revestimientos de las fachadas y de arreglar pavimentos y terrazas exteriores.