El exsecretario del Infide (Instituto para la Formación, Investigación, Documentación y Estudios Sociales), Pedro Castillejo, defendió ayer su gestión al frente de la entidad y aseguró que se defenderá "hasta el final" de la querella presentada el 28 de septiembre por el SOMA-FITAG-UGT por un presunto delito de apropiación indebida, por unos gastos sin justificar por valor de 68.604 euros. "Se me ha usado para llegar a José Ángel (Fernández Villa)", indicó para explicar que considera su actuación, "intachable". Al exsecretario general del SOMA, José Ángel Fernández Villa, le reclama el sindicato en la misma querella 360.000 euros que habría cobrado en concepto de gastos sin justificar, dietas del comité intercentros de Hunosa y el pago de un coche particular. La central les acusa de un delito penal de apropiación indebida.

"No acepto los calificativos de apropiación indebida y de aprovechamiento ilícito y personal" señaló Castillejo, que reconoció que en la fundación "pudo haber mala praxis en la gestión contable". El exsecretario del Infide remarcó que en el organismo dependiente del SOMA-FITAG-UGT había "control, un balance económico que se presentaba anualmente pero no llevábamos un asiento contable, que era labor de otra persona, que ejercía la misma tarea en el sindicato".

"No era mi papel ni mi responsabilidad", apuntó Pedro Castillejo, que ofreció una rueda de prensa en Oviedo acompañado por su abogado, Alfredo García, que se extendió durante más de una hora. Poco después de iniciar su intervención se tuvo que detener, emocionado. Aludió entonces a su familia, pidiéndole "perdón porque lo están pasando muy mal con esta campaña que estamos soportando". "El que me conoce sabe que no dejaré de luchar porque yo no me siento identificado, después de tantos años de trabajo, con esa persona que dicen que soy", manifestó.

Castillejo hizo referencia a los numerosos trabajos que se han desarrollado en la fundación desde su constitución por mandato del SOMA-FITAG-UGT. Y trasladó que utilizó tres tarjetas, dos de débito y una de crédito, aunque una de ellas sólo funcionó durante el centenario del sindicato. "Solamente yo, que me conste, tenía tarjetas bancarias para poder desarrollar mi responsabilidad", destacó antes de asegurar que en "todos los organismos" personas con cargos similares tiene medios para poder desarrollar sus tareas. "Si en Infide solamente las tenía yo, según dicen, no sé en el SOMA quién las tenía. Es una información que habrá que pedir judicialmente", dijo para añadir que "es lo lógico que se tengan".

"Sentémonos y si quieren jugamos al blanco más blanco", aseveró Pedro Castillejo. Entre los supuestos pagos irregulares por los que el sindicato denunció al exsecretario de Infide, figuran 22.762 euros corresponden a pagos de restaurantes y 2.810 euros a disposiciones en efectivo en el periodo de 2008 a 2014, según refleja la querella presentada por el SOMA-FITAG-UGT en el Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo.