Decenas de alumnos, profesores y padres del colegio El Bosquín de El Entrego se manifestaron ayer ante la Consejería de Educación, en Oviedo, para protestar por la supresión de un aula de primero de Infantil para el próximo curso en el centro. Docentes y familias, que han recabado hasta el momento 3.200 firmas de apoyo, consideran "injusta" la medida ya que "hay peticiones suficientes (un total de 33) para disponer de dos unidades", según recalcó Erika Gómez, profesora y representante de la comunidad educativa del centro.

"El plazo se agota porque el día 8 es el límite para que las familias matriculen en otros centros a los niños que no han conseguido entrar en El Bosquín", argumentó Gómez, para añadir a continuación. "Mañana (por hoy) vamos a volver a reunirnos para ver qué medidas de protesta ponemos en marcha. No nos vamos a parar ni nos van a callar", apuntó la docente. Gómez también anunció que la comunidad educativa se ha puesto en contacto con los grupos políticos representados en la Junta General del Principado para presentar una pregunta al consejero de Educación para que explique "por qué se suprime un aula en El Bosquín. Se dice que es un tema de reorganización del mapa educativo, pero otros centros, con menos peticiones de matrícula, tienen más aulas".

Cristina García, tesorera de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (Ampa) del colegio El Bosquín se pronunció en una línea similar. "El plazo se está acabando, pero vamos a seguir hasta el final luchando para que el Principado dé marcha atrás y no lleve a efecto la medida", resaltó la representante del colectivo de padres.

Hasta ahora la comunidad educativa del centro escolar de El Entrego ha protagonizado un encierro en las instalaciones del colegio, una sentada de protesta, "performances" y concentraciones en el parque de La Laguna, entre otras iniciativas.