Un día después de que el sindicato FICA-UGT denunciase que el Gobierno central aún no había convocado las ayudas a la producción de carbón para este 2016, casualidades de la vida, el Ministerio de Industria lanzaba la convocatoria a través del Boletín Oficial del Estado. Serán un total de 25,3 millones de euros los que se repartan, como máximo, entre las compañías privadas y la pública Hunosa. Unas subvenciones que se concederán por el carbón vendido a las térmicas, que se niegan a comprárselo por lo que si no venden nada, nada cobrarán, y no como se repartía en el anterior plan del Carbón, en el que se utilizaba el baremo de la producción y no de las ventas.
La convocatoria del Ministerio explica que el destino de las ayudas es el de "empresas mineras del carbón con unidades de producción por minería subterránea incluidas en el Plan de Cierre del Reino de España". Además, especifica que las subvenciones se repartirán "siempre que haya pérdidas de la producción corriente y se cumplan todas y cada una de las condiciones establecidas en el artículo 3 de la Decisión 2010/787/UE del Consejo, de 10 de diciembre, relativa a las ayudas estatales destinadas a facilitar el cierre de minas no competitivas".
Además, apunta el documento, "las unidades de producción deberán haber estado en actividad a 31 de diciembre de 2009", justo un año antes de aprobarse la Decisión de la Unión Europea que puso fecha al fin de la minería del carbón en el año 2018.
El Ministerio de Industria, a través del Instituto para el Desarrollo de las Comarcas Mineras, deja claro que las ayudas "estarán dirigidas a cubrir, total o parcialmente, las pérdidas de la producción corriente de empresas mineras con unidades de producción insertas en el Plan de Cierre, de acuerdo con lo previsto en el artículo 3.1 de la citada Decisión". Además, sitúa el importe máximo estimado destinado a financiar esta convocatoria en 2.300.000 euros para las empresas públicas -solamente concurrirá Hunosa- y de 23.000.000 euros para las privadas, por un total de 25.300.000 euros.
Las empresas tendrán quince días hábiles desde ayer para presentar sus solicitudes. Con el fin de calcular el dinero que se le asignará a cada empresa, la convocatoria recoge que "la solicitud deberá presentarse junto a los requisitos enumerados en el artículo 7 de la base reguladora, así como la estimación del coste de producción previsible y del ingreso previsible para el actual ejercicio carbonero a efecto de lo previsto en el artículo 1.2 de la citada base reguladora".
La convocatoria de las ayudas a la producción para 2016 supondrá un gran balón de oxígeno para muchas empresas, aunque está totalmente condicionado por la postura de las empresas eléctricas. Al no comprar carbón nacional las térmicas, las empresas mineras no pueden justificar ante Industria las transacciones para recibir las ayudas.
