El viejo cuartel de Langreo permanece sin actividad desde hace más dos años. Los agentes que prestaban su servicio en la construcción de Langreo Centro fueron trasladados al nuevo edificio después de tres años de paralización. La disputa por el pago del IVA entre el Ministerio del Interior y Sogepsa demoró la entrada en servicio del nuevo cuartel.
Cinco años después de que la sociedad regional concluyese la obra para levantar el acuartelamiento, aún no ha sido derribado la vieja construcción sigue en pie. Su estado de deterioro provocó incluso que el destacamento de Tráfico se trasladase a las dependencias de la Policía Local después de que las intensas lluvias agravasen la situación del edificio en el pabellón que ocupaba el área de Tráfico.
Los técnicos constataron en una visita realizada a principios de este año que el deterioro del inmueble había avanzado. Representantes municipales y del Ministerio del Interior observaron las cubiertas deterioradas, las carpinterías en mal estado, la falta de cristales y el aumento de la vegetación que han provocado la entrada de agua al interior de los bloques e incrementó su degradación interior. El Ayuntamiento de Langreo había solicitado entonces poder acceder al viejo acuartelamiento para constatar el estado.
El conflicto entre el Ministerio del Interior y Sogepsa no terminará cuando los tribunales diriman quién es el propietario y tiene que hacer frente, por tanto, al derribo. Tampoco han llegado a un acuerdo sobre el pago del IVA de la obra, que asciende a 544.000 euros, y será también el juez quien decida. Una cuantía que ha abonado Sogepsa de momento aunque este asunto está pendiente de resolución judicial.
Fue Interior quien recurrió a los tribunales para que la sociedad regional se haga cargo del viejo acuartelamiento. Sogepsa señala que "la única parte que ha soportado gastos hasta la fecha" ha sido ella, que destinó 5,1 millones al cuartel.
