Las labores del plan para la mejora del hábitat osero en el corredor de Pajares están a punto de finalizar. El proyecto, financiado por el Ministerio de Agricultura y coordinado desde la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, contaron con una financiación total de 1,4 millones y se desarrollaron a través de una inversión plurianual: los años 2013, 2015 y 2016. En total, se plantaron 65.767 árboles que propiciarán el paso de plantígrados por la zona y mejorarán la conectividad entre las poblaciones de oriente y occidente. También se impulsará el asentamiento de la especie en el municipio de Lena, fenómeno que ya ha empezado a producirse.

El director del parque natural de las Ubiñas-La Mesa, Jaime Gordo, explicó que "en este momento se están desarrollando las últimas labores de rozas mecanizadas y el tratamiento de la vegetación". Actuaciones que se ejecutan en los montes de Mudriello y Ladrones y que estarán listas, si todo marcha según lo previsto, la próxima semana. Según Gordo, "todo tiene que estar listo antes de que empiezan las primeras nevadas". Las rozas y el tratamiento de vegetación se han acometido en una extensión de 17 hectáreas. Del total de árboles plantados, la mayoría (41.565) fueron abedules. En concreto, este año, se han plantado 12.171 ejemplares de esta especie. También 2.219 rebollos y 643 mostajos. La reforestación se completó con 1.432 serbales y otros tantos espinos. "Los árboles tendrán una doble función; servirán para facilitar el paso y también para dar alimento a los plantígrados", señaló Gordo.

Si hay un fruto que los osos devoran, es la cereza. Es por eso que el plan incluyó la plantación de 2.128 cerezos, de los que 705 se plantaron el año pasado y ya crecen a buen ritmo. En 2015, el proyecto de plantaciones incluyó 24.675 ejemplares: 15.329 abedules, 940 robles, 1.210 rebollos, 341 mostajos. Se completó con 2.418 serbales y espinos en número idéntico. También 352 manzanos. La dirección general de Recursos Naturales desarrolló, además, una serie de actuaciones encaminadas a mejorar la convivencia de los plantígrados con ganaderos y reses. Así, el año pasado, se construyó un abrevadero en hormigón en masa, con quince centímetros de profundidad.

El proyecto para mejorar el hábitat osero sufrió un parón en 2014, derivado de la falta de fondos del Ministerio de Agricultura. Un año antes, en 2013, ya se habían acometido algunos trabajos encaminados a la mejora de la producción ganadera en la zona lenense del parque natural. Se repararon dos abrevaderos, mejorando la captación y conducción de agua y revistiéndolos exteriormente con piedra caliza. También fue un ejercicio para las plantaciones, con 23.295 ejemplares que reforestaron 21 hectáreas.

Nadie duda ya que el proyecto ha dado resultado. Hace unas semanas, en el censo de la población del oso pardo en la Cordillera Cantábrica, apareció registrada por primera vez una familia asentada en Lena. Se trata de una osa con, al menos, dos crías que vive a un paso de la autopista del Huerna (AP-66). También se han avistado plantígrados muy cerca de la población. De hecho, a mediados del mes pasado, un vecino de Espineo grabó con una cámara infrarroja a un oso por la noche. Parecía un ejemplar joven que se movía con tranquilidad por una finca, a menos de 500 metros de las viviendas. Estaba buscando comida.