Los libros se devoran en Moreda. Literalmente. El aula restaurante La Carisa, de la Escuela de Hostelería del IES Valle de Aller, ha iniciado el curso celebrando unas jornadas de gastronomía y literatura. En la carta, platos como el cocido madrileño de "Fortunata y Jacinta" (Benito Pérez Galdós) o timbal de macarrones, como el que servía el servicio del príncipe en "El Gatopardo" (Giuseppe Tomasi di Lampedusa). De postre, para subir la glucosa y poner en marcha las ideas, los dulces favoritos de personajes capaces de resolver cualquier misterio: "Sherlock Holmes" y "Miss Marple".

Los fogones llevaban ya horas encendidos cuando la cocina del aula restaurante llegó al punto de ebullición. José Carlos Albino se afanaba en remover la cazuela en la que se estaba preparando un cocido madrileño: "Es una receta sencilla, pero requiere paciencia", explicó. Un poco menos conocido es el ensopado uruguayo, como el que comían en "Cuentos de la selva" (Horacio Quiroga). Alba Donate y Christian Barrigón son los encargados de cocinar el estofado: "Los ingredientes son sencillos y tiene un punto de dulzor que lo hace diferente", señaló Donate, mientras picaba los cien gramos de panceta que dan más vida al plato.

Las caballas al horno de la carta, de las que se encargó Aroa Picatoste, son la receta original que aparece en "Maigret y el Asesino", una obra de Georges Simenon. "La señora Maigret los cocinaba con vino blanco, a poco fuego y con mucha mostaza", reza el libro. Y Picatoste lo siguió al dedillo: "Me parece que estas jornadas son muy originales, porque no sólo aprendemos de cocina", señaló la alumna.

Ese es el objetivo. Víctor Pérez, profesor de Cocina, explicó que "cada año escogemos un tema central para llevar a los fogones un poco de cultura". El año pasado fue el cine, este año la literatura. Escoger los platos no fue una tarea sencilla: "Hay muchísima gastronomía en los libros, muchas historias se desarrollan en torno a la mesa y sus platos", destacó. Fuera de la carta, a su pesar, tuvieron que quedar recetas de "Como agua para Chocolate" y un plato muy original de una obra de Shakespeare, que no desvela porque lo recuperarán en el futuro.

El menú de las jornadas, que se pueden disfrutar hasta este mediodía, se completa con unas albóndigas nicaragüenses. Son el plato estrella de la obra "Las albóndigas del coronel" (Rubén Darío). La receta, señaló Pérez, es "lo más fiel posible a la época en la que se narra la historia". Una sopa de verduras y pollo acompaña a la carne, en este plato que asombra a los comensales por el sabor y a los cocineros por el tiempo de elaboración. Sólo las carcasas de pollo tienen que cocer durante tres horas.

Todo lector que conozca a "Sherlock Holmes" (Arthur Conan Doyle) sabe que el detective más famoso de la historia es un amante de la buena gastronomía. Bebe los vientos por un pollo al curry, y adora los dulces. Y, si hay un dulce que le ponga la cabeza a funcionar, ese es el pastel Strasbourg. Los amantes de las intrigas pueden probar una receta, muy parecida a la de mamá Holmes, hoy en Moreda. El plato de postre incluye, para los que disfrutaron con las aventuras de "Miss Marple" (personaje de Agatha Christie), unos elaborados scones rellenos de mermelada de fresa. Y para que el buen sabor de boca dure aún más, hay magdalenas como las que despiertan recuerdos en "En busca del tiempo perdido" (Marcel Proust).