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Rioseco se queda sin la embotelladora de agua y el llagar en el polígono de Comillera

Sobrescobio otorga un plazo de 30 días a los lagareros antes de anular la venta de las parcelas, un proceso ya iniciado con la empresa envasadora

El polígono de Comillera, en Sobrescobio. FERNANDO GEIJO

Ni embotelladora de agua ni llagar de sidra. Así se encuentra ahora el polígono empresarial de Comillera (Sobrescobio), tras las últimas acciones realizadas por las empresas adjudicatarias de las parcelas del polígono y por el Ayuntamiento coyán. La última, en el Pleno municipal de ayer, en el que el gobierno local concedió 30 días más a la empresa del llagar para que presente alegaciones a la decisión de rescindir el contrato de compra de las parcelas del área industrial.

En los últimos meses, el Ayuntamiento de Sobrescobio comprobó la imposibilidad de desarrollar el proyecto de la embotelladora de agua por parte de sus adjudicatarios: la empresa incumplió con el pago del canon impuesto por el Consistorio, lo que es motivo de rescisión del contrato de venta de las parcelas del polígono. Estos mismos promotores se habían hecho con los terrenos restantes del polígono para impulsar un llagar de sidra. Ante el retraso en la presentación del proyecto, se decidió rescindir también este contrato. En el Pleno de ayer se ofreció, por "motivos de seguridad jurídica", tal y como apuntó el alcalde de Sobrescobio, Marcelino Martínez, ofrecer un plazo de 30 días de duración a Capital Water -impulsora de la iniciativa- para que presente alegaciones o la documentación necesaria para revocar esta decisión. En caso contrario, si se comprueba que no hay suficiente interés en desarrollar los terrenos empresariales a corto plazo, el contrato se rescindirá.

Ovidio Zapico, portavoz de IU, expuso que en las alegaciones ya presentadas inicialmente por la compañía, "se dice que presentaron un anteproyecto en diciembre de 2014, y que aún esperan respuesta municipal para poder redactar el proyecto final". En cualquier caso, al estar Capital Water involucrada en los dos proyectos, el del agua y el de la sidra, y al haber incumplido los compromisos de la embotelladora (que iba a costar 4,8 millones), lo más probable es que, antes de que acabe el año, los dos contratos se encuentren resueltos, y las parcelas del polígono, libres.

Si finalmente se liberan, la intención del gobierno local es el de sacar a concurso público la venta de estas parcelas. Eso sí, las que están reservadas para la embotelladora tendrán que utilizarse para desarrollar este proyecto. Las restantes, están abiertas a otras ideas, expuso el Alcalde.

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