"Tono de voz suave y tranquilo", "tiene una leve cojera", "empuñaba un revolver plateado". Estas son algunas de las anotaciones que hicieron los agentes de la Guardia Civil de Oviedo en sus exhaustivas investigaciones para dar con los atracadores de las sucursales bancarias de Figaredo y Ujo. Los dos sucesos no estaban conectados y los detalles fueron la clave para dar con los autores. En el caso de Figaredo, detuvieron al asaltante en Palencia. En el de Ujo, fue arrestado un grupo criminal formado por cuatro personas en Pozo Cañada y Albacete. El Instituto Armado agradeció la colaboración de otros cuerpos y fuerzas de seguridad, como la Policía Nacional y los Mossos d'Escuadra, que actuaron en todo momento coordinados y con buen entendimiento.

El atraco de Figaredo se produjo el pasado mes de diciembre.

El asaltante tenía, según los testigos, una voz suave y tranquila que no tembló cuando se dirigió a un empleado del banco: "No te pongas nervioso, no pulses ningún botón. Tengo una pistola, si quieres comer el turrón dame el dinero". El trabajador le dio todo el dinero que tenía y el asaltante se fue, caminando con "cierta cojera". "Esa cojera fue clave para singularizar al delincuente", explicaron desde el Instituto Armado.

"Operación mina"

Las pistas no eran muchas y la investigación fue complicada. La Guardia Civil de Oviedo definió el caso como "Operación mina" . Los agentes realizaron un trabajo de difusión interna de imágenes y pruebas recogidas en el escenario del atraco, dentro de la red de unidades dedicadas a la investigación criminal en la Guardia Civil. También difundieron esos mismos datos a la Policía Nacional. El trabajo tuvo su recompensa, el 4 de noviembre, cuando la Brigada de Policía Judicial de Palencia informó de la detención de una persona que coincidía con la descripción facilitada. La Policía Nacional de Palencia y la Guardia Civil de Oviedo dieron por esclarecidos dos delitos de robo con violencia e intimidación: uno en Figaredo y el otro en Palencia. El hombre de voz suave y palabras graves resultó ser un leonés de 64 años.

"Operación mascarilla"

Ropa de pintor, cubiertos con gorros y mascarilla. De esa guisa entraron los dos asaltadores que perpetraron un atraco en Ujo. La investigación de la Guardia Civil se denominó "Operación mascarilla" e incluyó la actuación del Equipo de Patrimonio de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Oviedo. Así supieron que, durante semanas antes del atraco y durante varios días, los delincuentes habían estado reconocimiento el terreno. También estudiando el número de empleados, la disposición de las cámaras de vigilancia y dónde tenían que aparcar el coche para que no se vinculara al atraco.

El reconocimiento del vehículo fue un paso muy importante para la investigación. Así, la Guardia Civil "pudo acceder a una serie de personas que podrían haber perpetrado el atraco". La "Operación mascarilla" entró en el sistema de coordinación de investigaciones y, transcurrido un tiempo, comienzan a aparecer coincidencias. El grupo criminal de cuatro personas terminó detenido: dos en Pozo Cañada, recopilando datos para un nuevo atraco, y otros dos en Zaragoza.