La clausurada mina de mercurio de La Soterraña, en Lena, aspira a ser un campo de investigación y un ejemplo para toda Europa. Esa es la ambición con la que el Ayuntamiento de Lena, a través de la concejalía de Gestión Ambiental y Política Forestal de Lena, y la Universidad de Oviedo, solicitan fondos europeos para iniciar la descontaminación en las instalaciones. Quieren formar parte del programa "Life" el próximo año, por lo que han presentado un proyecto valorado en 1,2 millones de euros.

La explotación de La Soterraña, ubicada en el alto del valle de Muñón, funcionó desde 1950 hasta 1974. Más de cuarenta años después de su cierre, no se ha acometido ningún proyecto de descontaminación, a pesar de las negras historias que rodean a la mina. Cuentan los trabajadores que, al inicio de la actividad, estaban totalmente expuestos a los gases y que no había protección. Muchos sufrieron secuelas por la contaminación de la sangre, además de infecciones en la piel y otras dolencias.

La fábrica empezó a decaer en los años sesenta, cuando el precio del mercurio cayó en picado porque había poca demanda del material. Un frasco de mercurio, que había llegado a tener un precio de 30.000 pesetas, costaba entonces 4.000. La mina ya no era rentable. En 1974, la empresa puso un candado en la puerta. Y así quedó, sin que nadie actuara para limpiar los terrenos.

Ningún proyecto posterior salió adelante. En la campaña de las elecciones generales de 2011, el PSOE anunció un plan de limpieza exhaustivo para La Soterraña si vencían en las urnas. No fue así y el ambicioso plan quedó en el aire. Los vecinos reclamaron en múltiples ocasiones que se tomaran medidas de protección para evitar que la contaminación llegara a la zona habitada. Uno de los momentos más peligrosos de los últimos años ocurrió cuando dos empresas desvalijaron parte de la mina sin tener permiso para manipular tóxicos. Fueron sancionadas por la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente.

El Ayuntamiento, junto a la Universidad de Oviedo, tomó las riendas el año pasado. En 2015, el área de Gestión Ambiental remitió ya un primer proyecto a la Unión Europea. Fue rechazado, los responsables del programa "Life" solicitaron más información en algunos puntos y una descripción más detallada sobre las labores a ejecutar. La Universidad acaba de culminar el segundo proyecto, que se remitirá en unos días a la espera de formar parte del programa "Life" el próximo año.

Extrapolable

En el Ayuntamiento de Lena ven con optimismo esta nueva oportunidad. "El proyecto de La Soterraña podría ser extrapolable a otras zonas de Europa, como es el caso de comarcas de Polonia afectadas por contaminación de mercurio", señalaron desde la oficina técnica de Medio Ambiente. La concejala, Gelos López, destacó que "estamos muy satisfechos con el trabajo que hemos realizando, en apoyo a la Universidad de Oviedo que es quien ha dirigido este proyecto tan importante para el concejo".

Importante y polémico. Los vecinos de la zona llegaron a poner en marcha una plataforma para defender sus intereses, ya que no se sentían respaldados por las administraciones. Los últimos estudios sobre la mina de La Soterraña indican que hay un alto nivel de contaminación en el entorno de la explotación, pero el resto del valle parece fuera de peligro. El proyecto que ahora está sobre la mesa es sólo una primera fase, ya que la limpieza total del entorno necesita varios años de trabajo.